Andalucía no va a cejar en su intento de potenciar el turismo de sol y playa, del que depende buena parte de su potencial económico, pero en los últimos años la región ha visto crecer de manera notable el interés de los visitantes por las zonas de interior.
Con este objetivo se acaba de aprobar la Estrategia Integral de Fomento del Turismo de Interior Sostenible de Andalucía Horizonte 2020. Un plan, dotado con 231 millones de euros, para potenciar el desarrollo turístico, las economías de escala, el asentamiento de población y la creación de empleo en más de 700 municipios de la comunidad. Con menos de 100.000 habitantes y no ribereños del mar.
El segmento de turismo de interior atrae a la comunidad en torno a 4,7 millones de visitantes, lo que supone un 18% del total de viajeros que recibe la región. Como características del segmento, se trata de un turista menos estacional, normalmente procedente del mercado nacional, siendo Andalucía el principal emisor, y con un alto grado de fidelización.
Los principales beneficiarios de esta iniciativa serán los empresarios y trabajadores del sector que desarrollen una actividad reglada, las entidades locales y los grupos de desarrollo rural, entre otros.
Esta actuación en encuadra en el Plan General de Turismo Sostenible de Andalucía Horizonte 2020 aprobado recientemente. Una actuación transversal con tres líneas fundamentales para impulsar la cohesión territorial, la dinamización socioeconómica y la creación de productos turísticos; siete programas, y 45 iniciativas concretas.
El documento incluye medidas para fomentar la diferenciación turística de las zonas de interior; impulsar iniciativas públicas y privadas dirigidas a dinamizar las economías locales; incentivar el acceso a las nuevas tecnologías y el posicionamiento ‘online’ de este segmento, y promover la comercialización de productos vinculados al mismo.
La Estrategia de Fomento del Turismo de Interior, cuyo diseño se ha realizado en un proceso de diálogo con más de 500 participantes, se financiará con recursos propios de cada consejería implicada y fondos externos a través de diversas líneas de ayudas, y capital privado. Además, su ejecución se evaluará periódicamente a través de una comisión de seguimiento, que medirá el impacto y los efectos de las iniciativas.