Barcelona. El presidente de la Comunidad Autónoma de Murcia, Ramón Luis Valcárcel, ha reivindicado que “el Corredor Mediterráneo incluya una línea destinada al transporte de mercancías desde la frontera española hasta el puerto de Cartagena, y todo ello debe estar en 2016”.
Se expresó en estos términos durante el simposio celebrado en el marco del Salón Internacional de la Logística y Manutención (SIL) de Barcelona, en el que se analizó el impacto socioeconómico en el área de influencia del Corredor Mediterráneo, acto en el que también participaron los presidentes autonómicos de Baleares, Comunidad Valenciana y Cataluña.
Asimismo, indicó Valcárcel que el trazado propuesto para esta infraestructura significa “hacer del Puerto de Cartagena una puerta al resto de Europa en conexión con el tráfico transoceánico, de Asia o de América; así como una revitalización de la zona con áreas de carácter intermodal, que propiciaría el surgimiento de zonas logísticas en torno a la comarca de Cartagena, y que repercutiría directamente en la creación de puestos de trabajo”.
El presidente precisó que el trazado de este tercer carril para mercancías pasaría entre Monforte (Alicante) hasta Cartagena para evitar la ruptura de la infraestructura en La Encina, ya que el corredor de Alta Velocidad entre Alicante y Murcia se ha diseñado para tráfico exclusivo de viajeros.
El presidente murciano explicó que, en el tramo español, el Corredor Mediterráneo establece junto a una red viaria de altas prestaciones, actualmente con un grado de ejecución muy elevado, una red ferroviaria de alta velocidad para viajeros y una red para mercancías, ambas interoperables y sujetas a estándares comunes. El jefe del Ejecutivo regional consideró de suma importancia la ejecución de este “auténtico proyecto de Estado”.
En todo caso, recordó que el objetivo final es disponer a largo plazo en la región de una línea exclusiva para tráfico de mercancías y que adelantar la interoperabilidad (de ancho de vía), aprovechando las instalaciones actuales en ejecución y de próxima finalización, es el mejor camino para conseguirlo.
Valcárcel también demandó el acondicionamiento de terminales para trenes de 750 metros de longitud y la electrificación de la línea, incluidos túneles y la solución de problemas de gálibo en los mismos para posicionar a la Región en ese futuro corredor de tráfico exclusivo o preferente de mercancías.