Madrid. El ex presidente del Gobierno y presidente de la Fundación para el Análisis y los Estudios Sociales FAES, José María Aznar, se ha mostrado confiado en que “un nuevo liderazgo político nos devuelva la prosperidad, estabilidad, credibilidad, confianza y coherencia, consiguiendo así que España vuelva a la vanguardia de las naciones libres adonde pertenece”. “Las políticas equivocadas que se han aplicado en los últimos años han perjudicado la sólida posición económica que España disfrutaba, así como su crédito internacional”, ha lamentado Aznar, que ha valorado que “la débil situación española no es una maldición histórica sino el resultado de decisiones políticas irresponsables para los españoles, para nuestros socios europeos y para la estabilidad mundial”.
Sin embargo, Aznar ha dicho estar “seguro de que España puede lograr recuperar un papel estabilizador y de liderazgo en el escenario internacional” y ha reiterado su “confianza inquebrantable en España y en el pueblo español”.
José María Aznar ha hecho estas declaraciones en el emblemático Union League Club de Filadelfia, al que ha acudido invitado por el Foreign Policy Research Institute (FPRI), uno de los más influyentes think tanks estadounidenses. En un discurso titulado ‘La situación del mundo: una perspectiva desde España’, el presidente de FAES se ha detenido en analizar las tentaciones proteccionistas que acechan a la salida de la crisis económica.
“El proteccionismo comercial no es la forma de manejar la actual crisis. Resistirse a las medidas proteccionistas puede no ser tarea fácil, pero es lo correcto para sacar al mundo de su bache financiero”, ha aconsejado Aznar, que ha insistido en que “cuando los gobiernos recurren al proteccionismo, cargan costes a los hogares, cargan costes a las empresas, ahogan a los mercados, y consiguen exactamente lo contrario a lo que andaban buscando”.
Aznar, que ha aludido a la globalización como “motor responsable de la drástica reducción de los niveles de pobreza extrema en el mundo”, ha celebrado en clave internacional que países como Brasil o Chile hayan “perseverado en políticas dirigidas a reformas estructurales y a la estabilidad” y que “el aventurerismo político del pasado haya sido felizmente superado”.
RECUPERAR CONFIANZA
Por la tarde, y desde la Wharton Business School de la Universidad de Pensilvania, la primera escuela de negocios de Estados Unidos, José María Aznar ha pronunciado un segundo discurso en el que ha vinculado el éxito de los procesos de reforma económica con la “transparencia y la voluntad para ganarse los corazones y las mentes de los ciudadanos para obtener un mandato político claro”.
“El desafío consiste en cómo conducir a las sociedades a lo largo de este proceso de reformas”, ha puntualizado Aznar, para el que “la cuestión clave es cómo recuperar la confianza. Y no se trata de una pregunta técnica. Es política”. Según el ex presidente del Gobierno, “esas reformas deberían estar basadas en principios claros: reconocimiento de la realidad, un diagnóstico sensato y la voluntad política para llevar a cabo esas medidas con responsabilidad y garantizando las libertades”.
Aznar ha recordado que, de acuerdo con el Pacto de Estabilidad y Crecimiento, “el proyecto del euro que todos acordamos es incompatible con políticas fiscales y económicas irresponsables e insostenibles”, un mensaje político que, ha considerado, “debería ser lanzado alto y claro nuevamente” para que “las naciones europeas en dificultades puedan presentar planes creíbles que devuelvan la confianza internacional al euro”.
Antes de concluir, José María Aznar ha llamado a reforzar las relaciones entre Europa y Estados Unidos, a los que ha animado a “cooperar en una respuesta para evitar un desastre económico y político”. “Una Europa fuerte es buena para Estados Unidos, un Estados Unidos fuerte es bueno para Europa, y un vínculo fuerte entre ambos es bueno para el mundo”, ha dicho.