A partir del 1 de enero será menos engorroso acceder a las ayudas al alquiler que facilita el Gobierno de Cantabria y, además, la modificación del decreto que regula estas ayudas permitirá incrementar el número de beneficiarios, posibilitando que puedan optar a ellas los beneficiarios que ya las recibieron en los ejercicios tanto en 2014 como en 2015. Para ello, se establece un nuevo límite de tres años, aunque condicionado a las disponibilidades presupuestarias.
Uno de los principales cambios que introduce el nuevo decreto pasa por la eliminación del límite del precio por metro cuadrado de superficie útil, que hasta ahora se fijaba en 9 euros por metro cuadrado, lo cual traía aparejado labores de comprobación y requerimiento de documentación a los solicitantes que retrasaba la resolución del procedimiento. A partir de ahora se sólo se exigirá que el alquiler de la vivienda no supere una renta de 500 euros mensuales.
También se elimina el requisito de acreditar una fuente regular de ingresos anuales iguales o superiores al importe de la renta del alquiler, ya que traía aparejado labores de comprobación de ingresos que el Plan Estatal no exige. Sin embargo, se mantiene la exigencia de no superar unos ingresos máximos, de tres veces el Indicador Público de Renta de Efectos Múltiples (Iprem).
La modificación del decreto también establece la reducción del plazo de presentación de solicitudes de calificación de alquiler, de dos meses a uno, al objeto de subsanar lo antes posible las situaciones problemáticas por las que atraviesan muchos de los solicitantes. En 2016 las solicitudes se podrán presentar entre el 4 y el 30 de enero.
Asimismo, se establece la imposibilidad de cambio de vivienda a los beneficiarios de las ayudas, para evitar los retrasos que dichos cambios conllevan en la tramitación de los pagos.
Por último, se suprime la limitación que impedía concurrir a esta convocatoria a aquellos solicitantes que ya hubieran obtenido ayudas durante dos convocatorias consecutivas, con la finalidad de beneficiar al mayor número de familias.
Aunque estos no tendrán la preferencia, quedando por detrás de los que soliciten la ayuda por primera vez o renueven la solicitada en 2015. Y, además, será necesario que exista partida presupuestaria que lo cubra.