La Sociedad de Activos Procedentes de la Reestructuración Bancaria (Sareb) ha acordado el traspaso de la cartera Teide, formada por más de un millar de viviendas residenciales, junto a garajes y trasteros, además de varias obras en curso, locales comerciales y suelos.
La operación, que ha supuesto valorar la cartera en 146 millones de euros, se articulará a través de un Fondo de Activos Bancarios (FAB) en el que el fondo Fortress tendrá participación mayoritaria, y permitirá a Sareb beneficiarse a través de su participación minoritaria de cualquier ganancia futura que se obtenga con la venta de estos inmuebles. La cartera está formada por más de un millar de viviendas situadas en Madrid, Andalucía, Castilla-León, Cataluña y Galicia, principalmente.
Este nuevo FAB ya ha sido registrado en la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV). Según los términos del acuerdo, los inmuebles en manos del FAB serán gestionados por Grupo Lar, empresa que también ha asumido una pequeña participación en este instrumento.
Los FAB son unos instrumentos financieros ideados exclusivamente para Sareb y dirigidos a inversores institucionales. Los FAB proporcionan una estructura eficiente para los inversores y deben ser gestionados por una gestora de titulización de activos.
En los últimos meses, esta venta ha tenido algunos cambios después de que Sareb decidiera cambiar parte de los activos que componen la cartera, lo que generó confusión entre los inversores. Inicialmente, se llegaron a barajar precios por el Proyecto Teide de 220 millones.
Después de las ofertas vinculantes, el banco malo lleva ya varios días sentado en la mesa con Fortress negociando la letra pequeña del acuerdo. Se desconocen los detalles, pero fuentes financieras esperan que Sareb y el fondo constituyan un nuevo Fondo de Activos Bancarios (FAB), participado en un 51% por el inversor norteamericano.
Esta es la misma fórmula que se eligió en la mayor venta de activos realizada hasta ahora por el banco malo, en el conocido Proyecto Bull. Entonces, HIG Capital se quedó con el 51% de un FAB con 1.000 pisos a desarrollar, por 100 millones de euros.