Así lo asegura Silvia Escámez, CEO del bróker hipotecario Finteca, en una conferencia para ofrecer las claves de la situación actual del sector junto a José María Alfaro, coordinador general de la Federación Nacional de Asociaciones Inmobiliarias (FAI)
Ambos expertos coinciden en que el sector inmobiliario está entrando en un proceso de “desaceleración” y “reajuste”, pero descartan un crash inmobiliario y crisis en el sector como en 2008
Este cambio de tendencia, asociada al actual contexto inflacionista, comportará una disminución de la demanda de inmuebles durante los próximos meses ante la pérdida de poder adquisitivo por parte de potenciales compradores, lo que provocará que los precios de las viviendas en venta bajen “moderadamente”
La inflación en Europa y la consecuente subida del Euríbor, que ha pasado de un tipo negativo a uno del 2,7% aproximadamente, ha situado a las hipotecas a tipo mixto como la opción más demandada por los compradores de viviendas. Así lo explica Silvia Escámez, CEO del bróker hipotecario Finteca, en una conferencia para analizar las claves de la situación actual del sector junto a José María Alfaro, Coordinador General de la Federación Nacional de Asociaciones Inmobiliarias (FAI).
“A día de hoy, el 90% de las hipotecas que firmamos en Finteca son mixtas, cuando a principios de año nadie las pedía”, explica Escámez. “El comprador tiene miedo de la subida de tipos en el corto plazo, pero espera que estos bajen en el largo plazo, por lo que entienden que el tipo mixto es la opción más inteligente. Está siendo el producto estrella”, asegura.
Respecto al sentimiento del consumidor, la CEO de Finteca añade que “hemos notado un freno en las solicitudes de hipotecas”, y que “en los últimos meses ha habido un auge de solicitudes de cambios de hipotecas variables a hipotecas fijas”. Sin embargo, a su juicio, “ahora ya es tarde para cambiarse a tipo fijo, porque creo que el Euríbor no va a subir más de medio punto, como mucho hasta el 3% o 3,2%, pero sí que se puede mantener en esos niveles durante el 2023”.
José María Alfaro: “No se anticipa un crash inmobiliario ni una crisis en el sector como en 2008. Estamos en otro escenario”
Por su parte, José María Alfaro asegura que las agencias inmobiliarias perciben ya preocupación entre los compradores ante la actual coyuntura económica marcada por la inflación y la subida de los tipos de interés.
De hecho, señala que el sector se adentra en un proceso de “ralentización» y la “demanda de viviendas disminuirá en los próximos meses, lo que previsiblemente comportará una bajada moderada de precios de las viviendas en venta, sobre todo en las principales ciudades españolas”.
No obstante, insiste en que no se anticipa un crash inmobiliario ni una burbuja inmobiliaria o crisis en el sector como sucedió en 2008. “Estamos en otro escenario. Están bajando los ritmos y se tarda más tiempo en vender una propiedad. Por tanto, habrá propietarios que necesiten vender a corto plazo que vayan ajustando el precio de partida”, puntualiza.
Asimismo, señala que “si bien es cierto que el aumento de los tipos de interés se traducirá en una moderación de las compraventas y en reajustes de precios, también lo es que se trata de una situación coyuntural, achacable al contexto de crisis inflacionista”. Además, enfatiza en que “este comportamiento del mercado inmobiliario no es generalizado y se da a distintos ritmos entre las diferentes comunidades autónomas, e incluso provincias o ciudades”.
En esta misma línea, Escamez considera que el sector está sufriendo un reajuste puntual que acabará “probablemente a finales del 2023 o en 2024”, y descarta cualquier escenario de crisis. “No estamos ni cerca de ver una burbuja en el sector”, apunta.
Respecto a la postura de las entidades bancarias frente a esta situación, la CEO de Finteca explica que “de momento, no vemos que estén endureciendo especialmente las condiciones de acceso a la financiación”, pero “sí que nos consta que están estudiando medidas para prevenir un posible auge de la morosidad”. Aun así, opina que los bancos “no van a dejar de ofrecer hipotecas porque es una parte fundamental de su negocio”, y asegura que “están ayudando a los compradores ajustando las ofertas y haciendo prácticamente trajes a medida”.