Madrid. Con un descenso en las operaciones de compraventa del 74% respecto al año 2006, 2011 acaba como el peor año para el sector inmobiliario desde el inicio de la crisis. Según un análisis del sector realizado por Eduardo Molet, consultor inmobiliario de entidades financieras españolas y extranjeras y fundador de Red Expertos Inmobiliarios, el precio de la vivienda y las operaciones continuarán en caída libre en 2012.
Según se desprende de este análisis, la profunda crisis que padece el sector se agrava por la dificultad actual para conseguir financiación. La crisis ha dejado fuera del mercado inmobiliario a los jóvenes de entre 25 y 35 años y, en consecuencia, a los pisos más pequeños, de 1 ó 2 habitaciones, que en teoría son los más asequibles. Esto ha provocado un cambio en la demanda: los compradores actuales tienen más de 45 años y demandan pisos de 3 ó 4 habitaciones, lo que está dejando en una situación crítica al ya de por sí frágil sector inmobiliario, y que se agudiza con la caída generalizada y continuada en los precios de la vivienda.
Tomando como referencia los máximos alcanzados en 2006, el precio de la vivienda ha caído desde entonces más de un 40%, y en la actualidad sólo se están vendiendo inmuebles que presentan descuentos cercanos al 45%.
Las previsiones para 2012 no son mejores. El precio de la vivienda, especialmente de la de segunda mano, caerá aún más, como consecuencia de la falta de crédito y de la problemática existente con los activos adjudicados de las entidades financieras. Algunas de ellas están anunciando descuentos sobre estos activos de más de un 50%, para poder sacarlos al mercado en este próximo año. Según explica Eduardo Molet, “a estos descuentos se tendrán que acoger el resto de entidades de crédito que tienen activos adjudicados y el sector inmobiliario en general, lo que hará bajar aún más los precios”.
“En 2010 la caída del precio de la vivienda de segunda mano rondaba el 33%. Este año se cerrará con un descenso superior al 41%, y en 2012 muchos inmuebles se venderán por la mitad de precio al que se vendían en 2006”, concluye Eduardo Molet.