El Gobierno de la Generalitat de Catalunya ha aprobado que el Instituto Catalán del Suelo (Incasol) efectúe e la compra de los terrenos del futuro Centro Recreativo Turístico (CRT) de Vila-seca i Salou (el conocido como BCN World), en poder de CaixaBank, y la posterior venta a Hard Rock, en un máximo de dos meses una vez se haya aprobado la modificación del planeamiento urbanístico que ampara el proyecto.
Hay que recordar que el pasado 29 de septiembre de 2020, el Tribunal Superior de Justicia de Cataluña (TSJC) emitió una sentencia firme que anulaba la ordenación del sector principal de este futuro complejo turístico.
Esta sentencia comporta la necesidad de modificar el Plan Director Urbanístico (PDU) del CRT de Vila-seca i Salou, que es el instrumento de planeamiento que determina la ordenación que tiene que tener el macrocomplejo de ocio proyectado en este municipio tarraconense.
La modificación tendrá que ofrecer una nueva ubicación de las zonas verdes y los equipamientos cuestionados por la sentencia del TSJC.
Hasta que esta modificación del PDU no esté aprobada, los terrenos que tienen que ser objeto de compraventa no tendrán las características propias del suelo considerado urbano.
El Gobierno catalán ha acordado la compra de los terrenos por parte de Incasol por un importe de 120 millones de euros y su posterior venta inmediata en BCN IR 3, la sociedad de Hard Rock que impulsa el CRT, en un plazo máximo de dos meses a contar desde la aprobación definitiva del nuevo PDU.
La operación de compraventa, además, quedará condicionada al hecho que la multinacional norteamericana subscriba una póliza de seguro que cubra el eventual riesgo derivado de las solicitudes de retasación de las fincas que se expropiaron en su momento en el ámbito donde se tiene que implantar el CRT. La empresa ya ha expresado su compromiso en este sentido.
Finalmente, el Gobierno ha autorizado a Incasol, dependiente del Departamento de Territorio y Sostenibilidad, a negociar los términos de las escrituras de compraventa, que tendrán que ser previamente aprobadas por el Consejo Ejecutivo.
El complejo combinará hoteles, áreas de ocio y entretenimiento así como una zona de convenciones y un centro comercial con tiendas y restaurantes.