Barcelona. La búsqueda de soluciones más sostenibles y económicas para crear suelo industrial es el objetivo del acuerdo firmado por las cuatro principales entidades públicas de suelo de España en el marco del Barcelona Meeting Point (BMP).
Los responsables de Sepes (Entidad Estatal de Suelo), INCASÒL (Empresa de Suelo de la Generalitat de Cataluña), EPSA (Empresa Pública de Suelo de Andalucía) y Sprilur (Sociedad Pública para la Promoción de Suelo y Construcciones Industriales del Gobierno Vasco) anunciaron que trabajarán conjuntamente en un estudio que permita ofrecer suelo industrial en condiciones más competitivas. El fin último de este estudio es facilitar la implantación de nuevos proyectos empresariales y la ampliación de los existentes para acelerar la recuperación económica y crear un tejido productivo más competitivo y diversificado. Esto a su vez contribuirá a cambiar el actual modelo económico, vulnerable ante situaciones de crisis como la que vivimos, por otro más sostenible y sólido.
Las entidades que se han comprometido con este objetivo han suscrito un acuerdo para avanzar en un estudio que fije en primer lugar cuáles son los costes que se están cargando al suelo industrial en España y en países de nuestro entorno, como Francia, Portugal o Alemania. Esto servirá para comparar los elementos que hacen más competitiva la oferta de suelo industrial en otros países frente a la oferta española. Algunas empresas han manifestado que las ofertas para suelo industrial en otros países europeos son mejores, en ocasiones porque las infraestructuras asociadas son menores, y en otras porque las compañías suministradoras de energía ofrecen un marco más claro y transparente para las nuevas actuaciones.
Estos y otros elementos se van a estudiar de forma comparativa de cara a proponer posteriormente las mejoras necesarias para que la inversión pública sea más eficiente, y la oferta de suelo, más competitiva para las empresas.
Reducir costes de conservación
Este primer paso entre las entidades públicas de suelo supondrá que, en el futuro, se abra un marco más amplio de colaboración en el que se aborden también otros temas, como la necesaria coordinación de los nuevos parques industriales con los Ayuntamientos, no sólo en la fase de planeamiento y construcción, sino una vez terminadas las obras de urbanización. El objetivo es lograr que los costes de mantenimiento de estos polígonos para las empresas instaladas en ellos sean equilibrados, sin dejar por ello de garantizar la adecuada conservación de los mismos.
Además, habrá que estudiar cómo ajustar el desarrollo de las nuevas actuaciones a la demanda real de las empresas, de manera que no existan grandes superficies urbanizadas y sin ocupar durante periodos de tiempo prolongados, lo que genera unos mayores costes de conservación.
El acuerdo suscrito está abierto a las empresas de gestión de suelo del resto de las comunidades autónomas que quieran adherirse para compartir sus experiencias, mejorar la coordinación y realizar actuaciones conjuntas que permitan ofrecer en toda España suelo en el que desarrollar actividades industriales, logísticas y terciarias en condiciones más competitivas y con la vista puesta en un nuevo modelo productivo más sostenible y equilibrado.