El Grupo Inmobiliario Alting celebró el pasado mes de febrero 33 años en el sector, un bagaje a sus espaldas que afronta con la vista puesta en la mejora de las expectativas empresariales que ha de llegar en el 2010.
Tras el cierre de un año 2009 complejo para el sector, donde la mayoría de empresas han tenido que realizar un sobreesfuerzo estratégico para pasar página, Alting Grupo Inmobiliario se erige como una de las compañías cuyos sólidos balances le han permitido continuar operativa.
Con la cautela necesaria en este tipo de coyuntura, la empresa inmobiliaria catalana pronostica una estabilización de las transacciones, acompañada por significativos cambios en la demanda. En el caso del sector terciario, ya es un hecho la caída de la demanda de operaciones de mayor superficie, así como el auge de zonas descentralizadas que se están reivindicando como nuevos centros financieros de Barcelona.
A pesar de la recuperación de la contratación, que se espera para el 2º semestre del 2010, nos encontramos con un 2009 que ha dejado un saldo demasiado alto de nueva oferta incorporada al mercado. Una oferta que el mercado no podrá absorber durante el 2010, llevando a un consecuente incremento de la tasa de desocupación.
En cuanto a la oferta residencial, el mercado se encuentra de nuevo en una etapa de estancamiento. Tras la transformación sufrida entre finales de los 90’ y el año 2006, donde la oferta ha crecido en demasía, se ha generado un parque inmobiliario que la situación económica doméstica no puede consumir enteramente.
Pese a ello, desde Alting Grupo Inmobiliario se tiene la convicción de continuar trabajando para llegar al correcto equilibrio de un mercado cambiante que ha de permitirnos plantearnos nuevos objetivos con el mismo rigor y profesionalidad de siempre.