Navacerrada (Madrid). El presidente de la CEOE, Juan Rosell, ha participado hoy en las jornadas del Campus FAES con una ponencia dedicada a analizar ‘La economía española en la Europa del euro’ y donde ha asegurado que “todos estamos de acuerdo en que hay que mantener el Estado del bienestar, pero para eso hay que hacerlo viable, compatible con la economía global, competitivo y sin fraudes”, y entre ellos ha citado el absentismo y el fraude fiscal.
En su intervención, el presidente de los empresarios españoles ha afirmado que “el gran dilema del Estado del bienestar no es su existencia sino su supervivencia y su consolidación”. “En los próximos años, la clave no es más Estado frente a menos Estado sino mejor Estado; sin grasa, con músculo y que marque reglas, poquitas, y que las haga cumplir”, ha apuntado. A este respecto ha denunciado que “la sobreregulación que tenemos en España es un grave problema para nuestro crecimiento y un atentado a la competitividad del país”.
Para Rosell, “el debate no debe ser más o menos gasto público, sino mejor gasto público, eficiente, suficiente, con evaluaciones y transparencias”. “Hay servicios públicos buenos y otros catastróficos; pues los hemos de decir, los hemos de evaluar y los hemos de cerrar”, ha puntualizado. “El todo gratis es utópico y retrógrado. Lo más antisocial es poner en riesgo el Estado del bienestar”, ha manifestado, y ha recetado “poner deberes a los ciudadanos y decirles hasta dónde se puede llegar”.
DETERIORO IMPORTANTE
Rosell ha confesado sentirse “preocupado por lo que estamos haciendo aquí y lo que están viendo desde fuera”. “La marca España está sufriendo muchísimo, el deterioro es muy importante y eso lo notan las empresas españolas que están por el mundo. Nuestro dato macroeconómico espantoso es el paro y con ese dato algo tendremos que hacer”, ha aseverado.
Durante su ponencia, Rosell ha hecho un llamamiento a la clase política, a la que ha apremiado a ir “adelante con las reformas”, que “hay que hacerlas, no enunciarlas”, y llevarlas a cabo “sin miedo y cuanto antes, y a poder ser con consenso”. “Pero si no puede ser con consenso, habrá que jugársela”, ha advertido. En su opinión, “los políticos son un reflejo de la sociedad, y si la sociedad quiere cambios, quiere debate y pasar a la acción, lo tienen que hacer los políticos”.
PYMES Y AUTÓNOMOS
Rosell se ha referido al paro y a la destrucción de empresas como el primer problema de España. “En los últimos años hemos destruido 250.000 empresas y un número parecido de autónomos, y ahí está el gran drama y la hipoteca sobre nuestro futuro”, ha lamentado. “Esta crisis ha destruido muchísimo capital y hay que volver a crearlo, y si en un momento supimos cómo hacerlo, no habrá otro momento como el actual para volverlo a hacer”, ha explicado, antes de matizar que “la situación actual no tiene nada que ver con la de hace diez años”.
En su opinión, España debe regresar a una situación que permita a los empresarios “contratar, aunque sea, a media persona”, porque de lo contrario “no tenemos posibilidades en el futuro”. En este sentido, el presidente de la CEOE ha puesto el acento en la importancia de las pymes y autónomos como motores de contratación, ya que ha considerado “muy difícil” que lo sean la Administración Pública y las grandes empresas.
ADAPTAR LA LEGISLACIÓN LABORAL
En relación a la reforma laboral, Rosell ha afirmado que es necesario “abrir el mercado laboral y adaptar la legislación al mundo real para tener posibilidades de que aquel se active y se cree empleo”. Entre las medidas a introducir, ha citado la reducción de los 43 modelos de contratación actuales a “seis u ocho” y una mayor flexibilidad para adaptar las condiciones laborales a las necesidades de venta.
“El objetivo final está clarísimo: hay que recuperar competitividad”, ha subrayado Rosell, que ha animado a “abrir debates y cerrarlos, enunciar nuestras debilidades e ineficacias e incentivar nuestras habilidades”.