París. Nuevo revés judicial contra Metrovacesa. A las investigaciones que la Fiscalía Anticorrupción sigue contra los ex presidentes, Joaquín Rivero y Román Sanahuja, se une ahora la decisión de un tribunal de París que obliga a la compañía –ahora dirigida por Vitalino Nafría tras su control por parte de la banca acreedora– a ejercer la opción de compra de un inmueble situado en la Avenue de la Grande Armée de la capital francesa, por un importe de 90 millones de euros, 85 correspondientes al precio del inmueble, propiedad de la sociedad gala G2AM, y los cinco restantes en concepto de pena convencional.
El origen de la disputa judicial se remonta a febrero de 2008 cuando, siendo presidente Roman Sanahuja, Metrovacesa se subrogó en un compromiso de compra del edificio para ser destinado a uso comercial que no llegó a concretarse. Al final de ese año, sendos litigios entre Metrovacesa y G2AM desembocaron, en julio de 2009, en una sentencia del Tribunal de Grande Instance que dio la razón a la empresa francesa y obligaba al grupo promotor español y a su filial gala a ejercer la opción de compra.
Metrovacesa recurrió ante la Cour d’Appel de París, instancia que declaró ilícita la promesa de compraventa y obligaba a G2AM a devolver 15 millones de euros más intereses, previamente desembolsados en concepto de pagos anticipados y ejecución provisional de la sentencia dictada, en primera instancia por el Tribunal de Grande Instance.
Asimismo, se liberaban las garantías que aseguraban el pago del precio pactado inicialmente por la compra del inmueble. La sentencia, aunque ejecutable de forma inmediata, era recurrible ante la Cour de Cassation, ante la que ejerció su derecho G2AM.
Ahora, esa instancia judicial ha estimado el recurso de casación en base a una de las alegaciones de naturaleza formal alegada por G2AM y anula, por tanto, la sentencia dictada por la Cour d’Appel, que ahora volverá a conocer sobre el fondo del asunto.