Al término del primer trimestre de 2014, la inmobiliaria Reyal Urbis arrojó unas pérdidas de 29,4 millones de euros, lo que supone elevar en un 8% los 'números rojos' contabilizados en el mismo periodo de 2013, según la nota remitida por la inmobiliaria a la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV).
Los ingresos a 31 de marzo de 2014 correspondientes a la explotación de los activos inmobiliarios del Grupo Reyal Urbis ascendieron a algo más de 37 millones de euros, de los cuales fruto de la actividad de promoción residencial son 6 millones. Y su cartera de contratos pendiente de entrega en promoción y suelo residencial asciende a 23 millones de euros.
Los ingresos por arrendamiento sufrieron una minoración con respecto al primer trimestre del ejercicio 2013 en torno al 57%, consecuencia de las desinversiones efectuadas princpalmente en dos inmuebles significativos, el centro comercial ABC Serrano y el edificio de oficinas situado en Avenida San Luis, ambos en Madrid.
El resultado financiero neto negativo con relación al 31 de marzo de 2013 ha sufrido una reducción del 52% aproximadamente, situándose en los 10 millones de euros netos negativos. Esta evolución positiva tiene su explicación principalmente en su componente de ingreso, al haberse recogido en este primer trimestre del ejercicio 2014 condonaciones de deuda por parte de entidades financieras por importe de 33 millones de euros, asociadas a ventas de suelo y entregas de inmuebles hipotecados.
Reyal Urbis dispone en stock de aproximadamente 580 unidades sobre rasante de inmuebles terminados, diversificados en más de 20 ciudades en España y en Lisboa (Portugal).
Respecto a su situación patrimonial, a pesar de tener patrimonio neto negativo a 31 de marzo de 2014, no se encuentra en causa de disolución de acuerdo con el artículo 363.1.d) de la Ley de Sociedades de Capital, en el que se establece que la Sociedad se disolverá por consecuencia de pérdidas que dejen reducido el patrimonio neto a una cantidad inferior a la mitad del capital social, a no ser que este se aumente o se reduzca en la medida suficiente, y siempre que no sea procedente solicitar la declaración de concurso. La sociedad fue declarada en concurso voluntario de acreedores en fecha 4 de marzo de 2013.
Por el lado del pasivo, destacar que se ha producido una reducción del pasivo financiero neto con relación al primer trimestre del ejercicio 2013 del 3%, efecto conjunto de la reducción del endeudamiento financiero bilateral, y el registro de los intereses devengados durante el periodo conforme a la exigencia de la normativa contable, si bien su liquidación efectiva en el caso de la sociedad matriz, en concurso de acreedores, dependerá de la cobertura de la garantía hipotecaria existente.