Canarias. A partir de este año, las familias residentes en municipios canarios ubicados en el medio rural deberán solicitar las ayudas para la rehabilitación de sus viviendas, cuando lo precisen, directamente al Gobierno de Canarias, a través del Instituto Canario de la Vivienda que en el marco del Plan de Vivienda de Canarias mantiene la línea de ayudas a la Rehabilitación, reposición y eficiencia energética de edificios y viviendas.
Hasta el año pasado, el Instituto Canario de la Vivienda ingresaba a los ayuntamientos canarios los fondos destinados a estas subvenciones para la rehabilitación de viviendas en el medio rural, en función de las necesidades que cada municipio manifestaba y de acuerdo a las disponibilidades presupuestarias. Posteriormente, eran los propios ayuntamientos los que distribuían estas cantidades entre las familias que precisaban realizar reformas en sus viviendas.
En general, se pueden solicitar estas subvenciones para realizar obras de mejora de la accesibilidad, seguridad, estanqueidad, eficiencia energética, higiene, salud y protección del medio ambiente, así como utilización de energías renovables.
Se consideran viviendas del medio rural las que se encuentren enclavadas en municipios con una población inferior a 10.000 habitantes, así como las que, perteneciendo a términos municipales de mayor población, se encuentren separadas del casco urbano y en una zona en la que predomine la economía del sector primario.
El Plan de Vivienda de Canarias contempla, además de la inversión que periódicamente realiza para mantener el parque público de vivienda, ayudas a la rehabilitación de barrios degradados, intervenciones en áreas de renovación urbanas, así como numerosas ayudas y subvenciones tanto para las comunidades de vecinos como los propietarios de viviendas aisladas.
Cuando el titular de la vivienda objeto de rehabilitación cuente con mas de 65 años podrá acceder a una subvención complementaria que podrá alcanzar el 100% del presupuesto protegido, con un máximo de 12.400 euros; también prevé subvenciones a la comunidad de vecinos de hasta 1.100 euros por vivienda, hasta 3.200 euros para los propietarios y prestamos convenidos a la comunidad y hasta 5.000 euros para propietarios de viviendas aisladas con ingresos de hasta 3,5 veces el IPREM.
El Plan de Vivienda actual considera colectivos preferentes a las familias con menores recursos, jóvenes, mayores de 65 años, mujeres víctimas de violencia de género, familias numerosas o con dependientes a su cargo, monoparentales, personas con discapacidad y personas legalmente separadas o divorciadas y contempla como objetivo que el esfuerzo de las familias para acceder a una vivienda protegida no supere la tercera parte de sus ingresos.