Santiago de Compostela. Si cada uno de los gallegos introduce en sus rutinas pequeños gestos responsables a la hora de consumir agua, se pueden ahorrar hasta 400 litros de agua al día. Una llave que gotea pierde un promedio de 30 litros de agua al día, por lo que asegurando cerrar bien la llave y reparar las posibles fugas, evitan la pérdida de este recurso. Siempre es mejor ducharse que bañarse, una ducha de 5 minutos precisa de 100 litros con un cabezal normal (50 con un ahorrador equipado de un regulador de caudal), mientras que para un baño precisamos 250 litros.
Otra recomendación es lavar los dientes con la llave cerrada, con el que contribuiremos a ahorrar 12 litros por minuto. En relación con las tareas domésticas, poner el lavavajillas y la lavadora cuando estén llenos implican un ahorro de 80 litros de agua. También es recomendable que cuando se friegan los platos, no dejar la llave abierta: primero enjabonar y más tarde aclarar con agua.
Otra de las recomendaciones es evitar el uso del inodoro como una papelera, ya que de este modo evitamos malgastar inútilmente 9-10 litros cada vez que se descarga, o descongelar los alimentos a temperatura ambiente, nunca debajo del grifo, podemos ahorrar un promedio de 15 litros. En el momento de lavar el coche, no se aconseja emplear la manguera, ya que se pueden llegar a gastar 500 litros de agua frente a los 50 de utilizar un caldero o a los 35 de llevarlo la una estación de servicio.
En lo que se refiere a las actividades de arroyo, hace falta regar en las horas de menos calor, es decir, la primera hora de la mañana o al atardecer. No se aconseja regar los días de fuerte viento y se deben seleccionar los sistemas de arroyo que más se adapten a los objetivos que se marquen: aspersión, goteo.
Estas medidas tienen como objetivo el uso razonable del agua ya que, aunque Galicia es una comunidad donde llueve con frecuencia, en los últimos años el nivel de precipitaciones registrado bajó considerablemente.
Actualmente, cada habitante consume un promedio diario de 363 litros al día, por lo que con este consumo se incrementa la garantía de abastecimiento a la población se se siguen las pautas indicadas.
El embalse que cuenta con mayor volumen de agua almacenado es lo de Portodemouros, en el río Ulla, ya que almacena cerca de 150,31 hectómetros cúbicos, aunque sólo está al 50,61% de su capacidad total.
El consejero Agustín Hernández, en su reciente visita a la ETAP de Nigrán, aclaró que la decisión adoptada por su departamento de autorizar el ajuste del caudal de estos dos embalses (de 300 litros/segundo a 150 en el de Eiras y de 20l/s a 5 en el de Zamáns) camina en la línea estudiada por Aguas de Galicia, por lo que la Xunta puede afirmar que hay agua suficiente para pasar el verano, incluso se puede decir que se incrementó el umbral.
Desde Aguas de Galicia se explica que a pesar de que los embalses de Galicia–Costa se encuentran más bajos que en el año pasado no estamos ante una situación de alarma. La primavera de este año fue una de las más secas de los últimos 50 años (fueron meses extremadamente cálidos, con registros históricos de temperatura y escasos días de lluvias), por lo que la falta de lluvias influye directamente en el caudal que alimenta las reservas de los embalses.