CatalunyaCaixa fomenta el alquiler de inmuebles con rentas muy por debajo del precio de mercado a aquellas familias que más están sufriendo el impacto de la crisis, como demuestran los más de 1.400 contratos de alquiler social que ha formalizado hasta la fecha.
La entidad tiene como objetivo poner el máximo de viviendas de su propiedad a disposición de las personas en situación más vulnerable, y para llevar a cabo este planteamiento ha promovido la firma de convenios con organismos públicos y otros agentes sociales, a los cuales la entidad cede una cartera de pisos para su alquiler a familias residentes que, por razones económicas, no pueden acceder libremente al mercado.
Hasta el momento se han firmado 33 convenios con ayuntamientos, ONG’s y con la Generalitat de Catalunya, mediante los cuales se han realizado 225 alquileres a precio asequible. Todos ellos cumplen con los requisitos en cuanto a calidad, ubicación y servicios, y se ofrecen con una renta asequible que oscila entre los 150 y los 350 euros mensuales, en función de la tipología y ubicación.
El convenio marco se inicia con la cesión de un número determinado de inmuebles y queda abierto para ampliarlo progresivamente. En este sentido, en lo que va de año la entidad ha ampliado el parque de viviendas cedidas a estos agentes en 103 inmuebles.
Además de los 255 alquileres firmados a través de agentes sociales, CatalunyaCaixa fomenta el alquiler a precio reducido de pisos de su stock a nivel particular, y también ofrece este tipo de alquileres a clientes que, por sus dificultades de pago, han firmado una dación de su vivienda. En conjunto, son 1.400 los alquileres a precio reducido que mantiene la entidad.
CatalunyaCaixa siempre se ha mostrado especialmente sensible con aquellas familias que más están sufriendo el impacto del cambio de ciclo económico. Hace más de un año, la entidad puso de manifiesto este hecho siendo la primera entidad en acogerse al Código de Buenas Prácticas hipotecarias aprobado mediante el Real Decreto-ley 6/2012, y paralizando todos los procesos de ejecución hipotecaria de primeras viviendas de personas físicas.
Además, hasta el 2014 ha flexibilizado el pago de las hipotecas de 83.000 familias y concedido 10.000 daciones. En muchos de estos casos se convierte la hipoteca en un contrato de alquiler a precio asequible para amortiguar el impacto social que pueden sufrir las familias.
Asimismo, desde el inicio del cambio de ciclo económico, CatalunyaCaixa está participando en diversas iniciativas impulsadas conjuntamente con instituciones públicas y organizaciones no gubernamentales para facilitar el acceso a la vivienda de personas con riesgo de exclusión social. Ejemplo de ello son los acuerdos con l’Agència de l’Habitatge de Catalunya, la antigua Sociedad Pública de Alquiler del Ministerio de Fomento o Cáritas. En todos ellos ha participado con la cesión de inmuebles a organizaciones que trabajan directamente con los colectivos susceptibles de acceder a este tipo de contrato de alquiler en condiciones especiales.