Los últimos datos publicados por el Instituto Nacional de Estadística ponen de manifiesto una tendencia al alza en el número de compraventa de viviendas que se consolida, un mes más, con las registradas durante el mes de abril, con especial tirón por parte de las viviendas usadas (lo que no es una buena noticia para reducir el stock de vivienda nueva que existe en el país).
La Asociación Profesional de Expertos Técnicos Inmobiliarios (APETI) ya advirtió hace tiempo que este escenario se daría en el momento en el que coincidieran dos factores estructurales: estabilidad en el empleo y financiación hipotecaria. Ambos están permitiendo un repunte tanto en la actividad como en el precio de la vivienda y permiten mirar con optimismo la consolidación para este año y el próximo, dando paso a una plena expansión a partir de 2020, donde se espera que la construcción avance con paso firme (lastrada por el enorme stock de vivienda nueva) y recupere parte del peso que tuvo en la economía nacional.
Pedro E. López, Presidente de APETI, afirma que «habrá que estar atentos a la aparición de operadores en el sector de la intermediación sin formación adecuada, tal y como sucedió en tiempos pretéritos de doloroso recuerdo. El ciudadano debe saber que solo un profesional acreditado puede orientarle y asesorarle convenientemente en la que puede ser la inversión más importante de su vida: la compra de su vivienda».
Por ello, APETI apoya sin reservas la actual tendencia de diversas comunidades autónomas en regular la actividad inmobiliaria con la creación de un registro de profesionales inmobiliarios que cumplan una serie de requisitos que le aporten formación y seguridad jurídica.
El Experto Técnico Inmobiliario (ETI) goza de esa formación y aporta las garantías necesarias para desarrollar su función respaldado por un seguro de responsabilidad civil por importe de 1.500.000 euros, además de estar sujeto a un estricto Código Deontológico y al sistema Arbitral de Consumo.
La Asociación Profesional de Expertos Técnicos Inmobiliarios (APETI) nace en 1993 en Avilés (Asturias) y adquiere carácter nacional en 1995, trasladando su sede a Madrid en 1999. Nace con el objetivo de formar y aglutinar a los profesionales expertos en Técnicas Inmobiliarias y desarrolla un amplio programa de formación a través de su escuela de formación, la Escuela Superior de Estudios Inmobiliarios (ESEI).