Espacio Natural de Doñana ha sido incluido por la Unión Internacional para la Conservación de la Naturaleza (UICN) en la Lista Verde de las áreas protegidas mejor conservadas. Hasta ahora, el único parque españoles que forman parte de esta exclusiva Lista Verde era Sierra Nevada. En el resto del mundo, otros 22 gozan de esta acreditación.
La buena situación de Doñana en este momento se percibe en múltiples datos e indicadores entre los que destaca los casi 540.000 ejemplares de aves acuáticas censadas en las marismas del Guadalquivir y el mantenimiento de la población de lince ibérico, con un total de 80 individuos.
También sobresalen las acciones para la recuperación de especies presa, entre las que destaca el proyecto de restauración del hábitat del conejo del monte, y el acuerdo suscrito con Red Eléctrica para el desarrollo de tareas de seguimiento del águila imperial ibérica. A ello hay que sumar el incremento del 8% en el número de visitas a los centros del parque y el mantenimiento de las actividades de educación y de voluntariado ambiental.
Además, en estos momentos se trabaja en el desarrollo del segundo ciclo de planificación hidrológica para el periodo 2015-20121, que culminará con la aprobación de los nuevos planes de las demarcaciones del Tinto-Odiel-Piedras, Guadalete y Barbate y Cuencas Mediterráneas andaluzas, y que recogerá orientaciones y medidas dentro de un marco de trabajo que beneficie a Doñana.
A caballo entre las provincias de Huelva, Sevilla y Cádiz, Doñana es hoy un laberinto de tierra y agua que da forma a marismas, lagunas y caños, cotos y pinares, vetas y veras, dunas, playas y acantilados espectaculares. Bonanza, Gallega, Ribetehilos o El Lucio del Cangrejo son claros exponentes de los complejos lagunares que dominan este espacio natural dando cobijo a miles de aves.
Entre los variopintos paisajes que también forman Doñana, destacan el sistema de dunas en movimiento que discurre entre Matalascañas y la desembocadura del Guadalquivir, más de 25 kilómetros de playa virgen y arenas blancas; la duna fósil del Asperillo, con más de 30 metros de altura; o, ya en la playa, el acantilado del mismo nombre formado por areniscas entre naranja y ocre debido a las aguas ricas en óxido de hierro que manan por los chorritos.