Madrid. Los analistas de RICS creen que aunque la demanda de la vivienda se haya mantenido estable desde que en noviembre de 2008 se registraran mínimos históricos, el futuro de la economía española y del sector residencial sigue siendo incierto.
Desde que en noviembre de 2008 se registraran las cifras más bajas (unas 80.535 hipotecas aprobadas), la concesión de créditos hipotecarios ha ido aumentado de forma modesta. Si bien, estos datos del INE son muy volátiles, por lo que RICS estima que para tener una idea más precisa de la situación en el mercado, seria necesario también observar otros factores macroeconómicos. Si se tienen en cuenta todos ellos, entonces obtenemos una imagen algo menos positiva de la tendencia en el sector residencial.
Aunque hay indicios de que el mercado laboral podría estar cerca de su estabilización, éste sigue deteriorándose. Con 60,000 personas más, el paro aumentó en el primer trimestre del año a 4.4 millones, a pesar que estas cifras sean inferiores al aumento que se produjo en el primer trimestre de 2009 con 583.000 personas. Al mismo tiempo, tras siete trimestres consecutivos de caídas la economía creció un 0.1% en el primer trimestre del año, según las cifras de Eurostat.
Joshua Miller, economista de RICS comenta:
“La tendencia en la demanda del sector de la vivienda en España es extremadamente incierta. Si el crecimiento económico es sostenido, esto podría generar una bajada del paro y con ello una mayor demanda de viviendas. Sin embargo, los índices de la actividad económica nos dibujan un cuadro llenos de contrastes, bastante mixto. Así, en abril mientras las cifras del sector terciario descendieron 50.9 puntos, los datos sobre el sector servicios se recuperaban un 53.3.
El nuevo paquete de medidas de austeridad anunciado la semana pasada por el gobierno español no parece que vaya a ayudar a la recuperación de la demanda del sector inmobiliario. Estas medidas incluyen la abolición de los €2,500 por el cheque bebe, que ayudaba a las familias en busca de mayor espacio y un corte de seis billones de euros de la inversión en el sector publico, que lamentablemente no ayudará a crear empleo.”