El verano se ha adelantado este año, con temperaturas de hasta 37 grados en algunas zonas de la península en mayo y parece que va a continuar en esta línea lo que queda de junio. Esto, sumado a las altas concentraciones de polen supone un revés para nuestra salud respiratoria, puesto que se multiplican los agentes contaminantes que respiramos tanto en exterior como en interior.
Desde Dyson aseguran que en situaciones como las siguientes los purificadores son grandes aliados:
Calidad óptima del aire independientemente del clima: se encuentran específicamente diseñados para mantener una calidad del aire óptima en interior sean cuales sean las condiciones climatológicas en el exterior, convirtiéndose en una apuesta saludable ante cualquier tipo de climatología adversa.
Alergias: estas máquinas también limpian el ambiente de polen y favorecen la mejoría en personas con alergia y asma. En este sentido los purificadores Dyson están certificados por la Fundación del Centro Europeo para la Investigación de la Alergia (ECARF) como aptos para alérgicos, lo que los convierte en dispositivos de gran ayuda a la hora de aliviar la sintomatología del asma y las alergias primaverales.
Ventilación: es un buen aliado para aquellas estancias que no disponen de un sistema de ventilación adecuado, generando un aire más limpio y puro. La ventilación, por otro lado, alivia las altas temperaturas, que también suponen un factor de estrés ambiental.
Las oficinas, refugio insuficiente contra la contaminación exterior.
Los expertos de Dyson, afirman que “al estar los edificios cada vez mejor selladas, puede parecer que estamos dejando fuera de ellas la contaminación exterior, pero en realidad se están manteniendo otro tipo de sustancias nocivas”.
Los contaminantes pueden acumularse cuando ventilamos o cuando salimos a la calle y traemos partículas adheridas a nuestra ropa o al pelo de nuestras mascotas. Esto, unido a las múltiples fuentes contaminantes dentro los edificios, cuyo ejemplo más representativo son los COV que emanan los perfumes, aerosoles, productos de limpieza o el formaldehído presente en muebles, colchones, y alfombras, supone que no podemos protegernos de la mala calidad del aire refugiándonos en interior cuando el calor aprieta.
El calor aumenta las partículas nocivas para el organismo
Existen investigaciones (1) que señalan cómo las olas de calor aumentan directamente los niveles de partículas (PM), dióxido de nitrógeno (NO2) y ozono troposférico presentes en el aire. Además, si se combinan con humedad las altas temperaturas propician la liberación de COV (Compuestos Orgánicos Volátiles), como es el formaldehído, un gas nocivo presente en muebles, colchones y paredes dentro del hogar. Las concentraciones de formaldehído en interiores son, en promedio, 20 veces más altas en verano que en invierno, dependiendo de la temperatura interior y las condiciones de humedad.
El calor también facilita que estos compuestos reaccionen entre sí. Cuando la luz solar reacciona con los óxidos de nitrógeno (NOx) y los compuestos orgánicos volátiles (COV) del aire se genera una niebla fotoquímica llamada ozono troposférico potencialmente nociva.
El reducido tamaño de los COV, el ozono troposférico y las partículas en suspensión de diámetro inferior a las 10 micras son capaces de penetrar profundamente en el aparato respiratorio y depositarse en los alveolos pulmonares, pudiendo llegar incluso al torrente sanguíneo, provocando también una aumento del estrés oxidativo, proinflamatorio y protrombótico¹.
Concretamente, el Dyson Purifier Cool Formaldehyde está diseñado para capturar partículas ultrafinas y alérgenos, destruyendo incluso compuestos orgánicos volátiles (COV) como el formaldehído. Con un sistema de filtración HEPA 13 estándar no sólo garantiza que no haya escapes, sino que también bloquea cualquier punto de fuga potencial a través del cual el aire sucio pueda entrar en la corriente de aire. De este modo, elimina el 99,95% de las partículas más pequeñas, de hasta 0,1 micras y, gracias a las mejoras implementadas en el recorrido de las corrientes de aire, el Dyson Purifier Cool Formaldehyde es un 20% más silencioso sin comprometer el rendimiento de la purificación.