Las consecuencias de la falta de un gobierno estable empiezan a aflorar, como sucede con el Plan de Vivienda Estatal, que rige hasta finales de este año, y sobre el cual no existe el más mínimo indicio de que existan trabajos preparatorios para sacar adelante un nuevo documento que lo sustituya.
Y es que contar con un Gobierno en funciones limita mucho las competencias, como por ejemplo, como sucede en este caso, para aprobar un nuevo plan cuatrienal que permita dar respuesta a las demandas actuales de la sociedad.
Por eso, algunas comunidades autónomas, ante la evidencia de que el año próximo no habrá un nuevo plan, han comenzado a negociar la prórroga del actual. Murcia ya lo ha hecho, logrando que el Ministerio de Fomento se comprometa a destinar casi 15 millones de euros por los algo más de 4 que aportaría el Ejecutivo autónomo.
Para culminar la prórroga, a partir de ahora será necesario iniciar toda la tramitación para suscribir una adenda al convenio firmado en 2014 por las administraciones estatal y regional con el objeto de ampliar un año más el esfuerzo inversor.
De no llevar a cabo esta prórroga, desde el 1 de enero de 2017 quedarían suprimidas las nuevas subvenciones estatales para vivienda y rehabilitación.
En Murcia, el Plan de Vivienda es esencial para no prescindir de unas ayudas que, a falta de cerrar el alcance de todas las convocatorias abiertas este año, han atendido a más de 8.100 familias y han beneficiado a más de 32.660 personas.
Con esos 19 millones de euros previstos para 2017 se atenderán las principales acciones en política social de vivienda, como las ayudas al alquiler y acciones proactivas de vivienda, como la rehabilitación, que generen empleo y riqueza en los municipios donde se lleven a cabo estas actuaciones.
La iniciativa del Gobierno murciano apunta a que será la línea a seguir por el resto de comunidades autónomas. No quedará otra para evitar paralizar las ayudas y, por ende, proseguir con ese mínimo aumento de la actividad constructora y de rehabilitación que, con el plan vigente, se estaba produciendo.
No obstante, habrá que ver lo dispuesto que está el Gobierno central en funciones -con Rafael Catalá al frente del Ministerio de Fomento – para acelerar la firma de esas adendas que permitan prorrogar los convenios.