Toledo. , Francisco Javier Nicolás, ha pedido al principal grupo de la oposición municipal que reconsidere su postura en torno al Plan de Ordenación Municipal (POM), a la vez que le exigió “la misma lealtad con el que se aprobó” cuando el PP gobernaba y fue apoyado por el PSOE porque “es fundamental para no parar la ciudad y para la creación de empleo y de riqueza”.
Nicolás hizo esta consideración durante una rueda de prensa en la que afirmó rotundamente que el POM “está en vigor y vigente en todos sus efectos”, ya que no hay una sentencia firme del Tribunal Supremo que indique lo contrario tan sólo las sentencias del Tribunal Superior de Justicia de Castilla La Mancha (TSJCM) para las que caben recurso y que no son firmes.
El concejal basa estas afirmaciones en los informes elaborado por los servicios jurídicos del Ayuntamiento de Toledo los cuales señalan que todas las actuaciones que se ejecuten relativas al POM (desarrollo de planes parciales, licencias, etc), se harán “con garantía jurídica”.
De esta manera, Nicolás solicitó al PP que reconsidere su postura y no genere “inseguridad jurídica”, porque lo único que consiguen con ello es alejar a posibles inversores que generarían riqueza y empleo en la ciudad.
“El PP tiene que reconsiderar su situación y volver al consenso para que este POM, que crea riqueza y empleo, siga siendo apoyado por el PP y el PSOE”, subrayó, a la vez que añadió que “con la postura del PP se crea duda, inseguridad jurídica y económica; se para la ciudad y se echa para atrás la iniciativa privada”.
Nicolás aseguró que el desarrollo de la ciudad “está por encima de contiendas políticas” y se mostró firme al afirmar que desde el gobierno municipal “no estamos dispuestos a que la ciudad vuelva al siglo pasado”.
Por su parte, el Partido Popular insiste en que el plan ha estado vigente hasta que el Tribunal Superior de Justicia de Castilla-La Mancha (TSJCM) declarase que es contrario a derecho «y por tanto nulo».
La consecuencia jurídica de la anulación del POM, según el PP, es que, a día de hoy, el plan de ordenación municipal «no existe», y por la tanto es «imposible» ejecutar proyectos. Para el PP plantear la ejecución de un plan que «es nulo» es una irresponsabilidad puesto que si el Tribunal Supremo no revocase en el futuro lo dicho por el TSJCM, las consecuencias económicas para la ciudad de Toledo ‘serían muy graves’.