Las medidas que, de cara al próximo año, vienen anunciando algunos ayuntamientos, en el sentido de introducir bonificaciones para que el coste del Impuesto sobre Bienes Inmuebles (IBI) sea menos oneroso en función del uso de energías renovables en las viviendas, tendrán una cobertura adicional por parte del Estado, gracias a la enmienda introducida en los Presupuestos Generales del Estado de 2016 para modificar la Ley Reguladora de las Haciendas Locales.
De esta manera, además de fomentar la construcción y adquisición de bienes inmuebles energéticamente eficientes, así como la realización de instalaciones u obras para la obtención de la referida certificación, se busca poner en orden en el desaguisado que se estaba generando, con las iniciativas anunciadas por algunos ayuntamientos, como Madrid y Valencia, cuando en realidad las corporaciones locales no pueden poner rebajas en el IBI si no están contempladas en la ley.
Así, a partir del próximo 1 de enero de 2016 y con una duración indefinida, los ayuntamientos podrán introducir en sus ordenanzas fiscales esa bonificación sobre la cuota íntegra del IBI, en función de la calificación de eficiencia energética de los inmuebles.
Para aquellos edificios -los menos- que hayan sido calificados con una A, distinguiendo con ello máxima nota de eficiencia energética, la bonificación podrá llegar hasta el 20%.
A partir de aquí, será de hasta el 16% para los edificios calificados con una B y de un máximo del 12% para los que tengan una C. Los de peor nota, D y E, la bonificación se quedará en máximos del 8% y del 4%, respectivamente. Los inmuebles con una calificación energética de F o G, o que no dispongan de certificado energético no podrán beneficiarse de ninguna bonificación.
Para que la bonificación se pueda aplicar, la calificación energética del bien inmueble deberá ser acreditada ante el ayuntamiento por el sujeto pasivo, mediante la aportación del certificado por el que se aprueba el procedimiento básico para la certificación de la eficiencia energética de los edificios.
También está previsto que el PP introduzca otra enmienda a los Presupuestos del próximo año en la que prorroga para 2016 la reducción de los tipos impositivos previstos en el Impuesto sobre los Gases Fluorados de Efecto Invernadero para el ejercicio 2015, con la aplicación de un coeficiente del 0,66 sobre los gravámenes que se obtengan.