Empiezan a apreciarse los síntomas de recuperación en numerosos mercados europeos, especialmente con respecto a los niveles de ventas y los precios de la vivienda. Sin embargo, España sigue inmersa en un circulo vicioso, según el estudio de la vivienda de RICS*.
Entre primavera y verano del 2009, el sector inmobiliario residencial empezó a recobrar vida en un gran número de mercados europeos y es de esperar que en 2010 la recuperación sea mayor. Sin embargo los países europeos con economías vulnerables continuarán a experimentar la depresión en sus mercados y caídas en los precios.
En algunos países los precios de la vivienda han subido vertiginosamente con respecto a 2008. En 2009, los precios crecieron un 12 % en Noruega, 8 % en Finlandia y un 7 % en Suecia. En Gran Bretaña el precio de las casas subió 1% en total en 2009, lo que supone un ascenso del 10 % con respecto al precio mínimo alcanzado en abril de 2008.
En Alemania, Italia, Holanda y Francia, el año pasado los precios cayeron de forma moderada (entre -4% y -6%) y aunque todavía frágiles, estos mercados empiezan ya a estabilizarse y se aprecia cierto crecimiento en los precios de las casas.
Sin duda, los peores resultados en 2009 se registraron en Irlanda, España, Grecia, gran parte de los países de Europa central y oriental, y en particular en los países bálticos, donde los precios descendieron entre -27% y -53% en 2009.
En todo caso, según el estudio de RICS la inseguridad permanece en el aire, ya que las economías europeas tan solo muestran signos leves de crecimiento, lo que frenará la activación del sector de la vivienda en Europa, sobre todo si el paro continúa creciendo.
El autor de este informe, Michael Ball, profesor de la Universidad de Reading en Gran Bretaña, dice: «La poca profundidad que la crisis ha tenido en la mayoría de los mercados residenciales europeos ha sorprendido a muchos analistas. Pero Europa es muy diferente a Estados unidos, y se ha respondido a la crisis de forma muy distinta.
En general, en Europa el número de hipotecas sin pagar tan solo creció de manera modesta. Además la combinación de unos niveles de interés extraordinariamente bajos y el conjunto de medidas adoptadas por los distintos gobiernos europeos ha ayudado a frenar la caída de los mercados de la vivienda en casi toda Europa. A todo ello se suman los primeros signos de recuperación económica.
Sin embargo, por desgracia todavía quedan grandes problemas por resolver. En la mayoría de los mercados europeos el acceso al crédito sigue siendo limitado y la situación es todavía de incertidumbre.”
Amadeu Arderiu Calvo MRICS, consultor y miembro de RICS en España comenta:
“Mientras en unos países europeos, gracias a la inyección de liquidez, los precios de las casas han vuelto a subir a niveles similares a los que se registraban con anterioridad a la crisis, en otros mercados el boom inmobiliario ha arrastrado sus economías en una especie de circulo vicioso.
En España, por ejemplo, las perspectivas de la vivienda son bastante inciertas, ya que las difíciles condiciones económicas no parecen ayudar a este sector y el elevado excedente de casas de primera y segunda residencia que permanecen sin vender podría incluso empeorar la situación.”
