Fueron años de locura, la década en la que Sacyr y Vallehermoso han andado el camino juntos. Años de inversiones multimillonarias, las mismas que hoy lastran unas cuentas que el grupo constructor no quiere aguantar ni un minuto más. Se busca a quien endosarle esos activos, en su mayoría terrenos, comprados a crédito a precio de oro, y que hoy acarrean minusvalías estratosféricas.
Operaciones lucrativas fueron muchas y muy variadas durante el ‘boom’ inmobiliario, pero pocas con el alcance que tuvo la llevada a cabo hace ocho años entre el Ayuntamiento de Navalcarnero y Vallehermoso, la filial inmobiliaria del Grupo SyV, presidido entonces por Luis del Rivero. El Consistorio, previo acuerdo con la promotora, le adjudicó por 185 millones de euros una parcela rústica de 1,38 millones de metros cuadrados segregada de la Dehesa de Mari Martín.
Vallehermoso, como propietaria del 93% del sector 15, llegó a presentar la iniciativa para urbanizar, por otros 70 millones, el terreno donde edificar 5.165 viviendas, un 30% más de las contempladas inicialmente, y el año pasado se aprobó el proyecto de reparcelaión. El 7% restante, correspondiente a sus propias cesiones lucrativas, también fue vendido por el Ayuntamiento por casi 9 millones de euros. Las parcelas de uso residencial a la promotora Hijes, y las de terciario-comercial a la cadena de alimentación Ahorramas.
Para cuadrar la operación, y que la finca dejara de ser rústica para pasar a ser urbanizable, sólo faltaba el visto bueno de la Comunidad de Madrid. Dicho y hecho. A pesar de que el Gobierno regional mostró sus reticencias e incluso obligó a recortar, tras el definitivo informe de análisis ambiental, la propuesta inicial presentada por el Ayuntamiento de Navalcarnero, finalmente, el 9 de julio de 2009, la aprobó.
De las 22.000 viviendas propuestas en 2005 solo las de Vallehermoso podrán construirse, aunque tampoco estas obedecían a una necesidad imperiosa. En esta localidad de 23.000 habitantes, situada a 31 kilómetros de la capital, todavía quedaban y quedan pendientes de desarrollar la mayoría del suelo recalificado en 2002 para más de 10.000 viviendas y sendos ámbitos terciarios.
Para ver las primeras viviendas de Vallehermoso en el sector 15 –en una zona estratégica al norte de la localidad, entre la M-600 y el barrio de La Dehesa, y próxima a la futura estación de cercanías– habría que esperar un mínimo de seis años decía en 2010 Lorenzo Castilla, director comercial de la promotora.
Aunque “antes y después” de la recalificación, Vallehermoso ofreció vender parte de estos terrenos para compartir el riesgo, y llegó a valorarse la inversión, finalmente ninguna operación llegó a cuajar por no ser la promotora propietaria de los mismos al no haber pagado en su totalidad los 185 millones comprometidos.
Respecto a la salida al mercado de esta oferta residencial, el propio Castilla comentaba en 2010 que “ahora estamos en un momento en el que parece que el mundo se va a acabar, pero lo cierto es que va a haber una demanda anual de 200.000 viviendas durante diez o quince años”. Qué iluso.