La calidad del crédito hipotecario cada vez mayor, como consecuencia de las mejores condiciones económicas en las que se encuentran los hipotecados, una vez desaparecidas las carteras más complicadas.
Y es algo que se nota en las ejecuciones hipotecarias. En 2015 se iniciaron en España 68.135, que representan un descenso del 15,6% respecto a las presentadas el año anterior, según el informe «Efectos de la crisis económica en los órganos judiciales», hecho público la Sección de Estadística del Consejo General del Poder Judicial. Es la cifra más baja de las registradas desde 2009, cuando se iniciaron 93.319 ejecuciones hipotecarias, superadas hasta 93.636 en 2010. Desde entonces, la tendencia es descendente.
Andalucía es la única de las diecisiete Comunidades Autónomas en la que no se registró una bajada de las ejecuciones hipotecarias en 2015: las 17.365 iniciadas -una de cada cuatro a nivel nacional- suponen un incremento del 2,2% respecto al año anterior.
En el cuarto trimestre de 2015 las ejecuciones hipotecarias iniciadas en toda España fueron 15.785, un 15% menos que en el mismo periodo del año anterior. El número más elevado de ellas se registró en Andalucía -4.675, el 29,6% del total nacional-, seguida por Cataluña -2.705, el 17,1%- y la Comunidad Valenciana -2.157, el 13,7%-.
El número de lanzamientos practicados el año pasado fue de 67.359, lo que supone un descenso del 1,1% respecto a los 68.091 de 2014. Los lanzamientos afectan a distintos tipos de inmuebles, no solo viviendas y, en el caso de éstas, no solo a vivienda habitual.
Más de la mitad de esos lanzamientos -35.677, el 53%- fue consecuencia de procedimientos derivados de la Ley de Arrendamientos Urbanos (LAU), mientras que otros 29.225 -el 43,4%- se derivó de ejecuciones hipotecarias y los 2.457 restantes obedecieron a otras causas. Los lanzamientos por impago del alquiler experimentaron una disminución del 1% en 2015, mientras que los derivados de ejecuciones hipotecarias aumentaron el 1,2%.
Cataluña -con 15.557, el 23,1% del total nacional- fue la Comunidad Autónoma en la que el año pasado se practicaron más lanzamientos, seguida por Andalucía -10.694- y la Comunidad Valenciana, con 10.037.
Atendiendo solo a los lanzamientos que fueron consecuencia de procedimientos derivados de la LAU, la clasificación la encabeza también Cataluña, con 9.685; seguida por Madrid, con 5.278; Andalucía, con 4.469; y la Comunidad Valenciana, con 4.034. En cuanto a los derivados de ejecuciones hipotecarias, en la Comunidad Valenciana se registraron 5.767, en Andalucía 5.707 y en Cataluña 5.337.
El informe incluye también el número de lanzamientos solicitados a los servicios comunes de notificaciones y embargos, aunque con la advertencia de que este servicio no existe en todos los partidos judiciales, por lo que el dato permite medir la evolución, pero no indica los valores absolutos. Además, el hecho de que un lanzamiento sea solicitado al servicio común no supone que éste lo haya ejecutado.
Con estas premisas, los datos disponibles reflejan que el número de lanzamientos solicitados a los servicios comunes en 2015 fue de 69.631, un 0,6% más que el año anterior. De ellos, 42.482 terminaron con cumplimiento positivo, lo que representa un descenso del 6,2% respecto a 2014.
Entre el 1 de octubre y el 31 de diciembre de 2015 se practicaron en España 16.616 lanzamientos, un 5,1% menos que en el mismo periodo del año anterior. El 53,3% fue consecuencia de la LAU, el 43,7% se derivó de ejecuciones hipotecarias y el 3% restante obedeció a otras causas.
Como en el caso de los datos anuales, también en el cuarto trimestre de 2015 son Cataluña -con 3.923, el 23,6% del total-, Andalucía -con 2.604, el 15,7 %- y la Comunidad Valenciana -con 2.446, el 14,7%- los territorios con más lanzamientos practicados.
Además, el número de lanzamientos solicitados a los servicios comunes de notificaciones y embargos fue de 17.921, un 3,6% menos que en el mismo trimestre de 2014. De ellos, 10.563 terminaron con cumplimiento positivo, lo que representa una disminución interanual del 13,3%.
