lunes, 9 junio 2025
Newsletter

Solaria, con los chinos para lo bueno y para lo malo

Madrid. En el seno de la empresa española de paneles fotovoltaicos Solaria, los chinos están siendo protagonistas. Para lo bueno y para lo malo.

Bueno, porque, tras la aplicación de las medidas antidumping impuestas a los paneles fotovoltaicos de origen chino, que hace unas semanas aprobó la Comisión Europea, por considerar que el país asiático vende estos productos por debajo del precio de coste, la compañía española ha logrado nuevos contratos que han llevado a la dirección a retirar  el Expediente de Regulación de Empleo pactado el pasado mes de marzo.

El ERE que contemplaba la extinción de 71 contratos y la reorganización de la bolsa de horas del resto de la plantilla, que quedaba integrada por 151 personas.

Y malo, porque, son precisamente dos grupos chinos los que han pedido el concurso necesario de Solaria por impago de una deuda de 31 millones de euros. Dongfang Electric y la aseguradora de créditos a la exportación Sinosure  presentaron la diligencia ante el Juzgado de lo Mercantil número 8 de Madrid el pasado mes de mayo.

Las dos empresas reclamantes han aportado varios documentos para sostener que la petición de concurso necesario se basa en las dificultades del grupo español y en “el preocupante fondo de maniobra negativo”, que es de 30,9 millones. “Resulta indudable que este hecho agrava de forma muy significativa la capacidad de la sociedad para continuar sus operaciones y obtener ingresos”, sostienen los asiáticos en su demanda.

El fondo de maniobra es una magnitud que indica la diferencia entre el activo corriente y el pasivo corriente y tiene una incidencia directa en la capacidad de una empresa para cumplir con sus obligaciones de pago. Es decir, es determinante en la liquidez de la compañía.

La reclamación de Dongfang proviene de la venta de células y otros componentes a Solaria. De aquella operación, y tras varias reclamaciones de pago por parte del grupo chino, quedó una deuda de 413.038 euros. Por su parte, Sinosure ostenta la condición de acreedor de Solaria por haberse subrogado en un crédito por valor de 1,6 millones de euros cuyo titular era la empresa también china Hendiang, al que debe otros 1,54 millones.

Esta empresa había suministrado células fotovoltaicas a Solaria en el marco de un contrato de seguro de crédito suscrito entre Hendiang y Sinosure. Tras producirse un impago, en junio de 2012 estas dos formalizaron un acuerdo privado de pago por el que se reconocía la existencia de una deuda por parte de Solaria valorada en 3,565 millones de euros y 705.801 dólares (543.886 euros). En el documento se acordó una deducción de 417.093 euros sobre los 3,5 millones y un calendario de pagos desde junio de 2012 a marzo de 2013.

- Advertisement -

Comparte las Noticias en tus Redes Sociales

Síguenos

- Publicidad -

CONTENIDOS DE PORTADA

- Publicidad -

CONTENIDOS RELACIONADOS

El 75% de los compradores exige viviendas con certificación energética

La sostenibilidad se ha convertido en un criterio central para quienes...

Cómo están cambiando las oficinas en 2025 según Steelcase

El entorno laboral atraviesa una transformación profunda marcada por la irrupción...

Obsolescencia en oficinas en Madrid y Barcelona con 11 millones de metros en riesgo

La transformación del mercado inmobiliario de oficinas en España exige actuaciones...

El real estate apuesta por el branding para impulsar el modelo living

La expansión de nuevas fórmulas habitacionales como el build to rent,...

Falta de profesionales cualificados bloquea las reformas en España

La crisis de mano de obra cualificada se ha convertido en...

Riesgos estructurales por instalar piscinas portátiles sin evaluación técnica

Instalar piscinas portátiles sin evaluación técnica previa puede comprometer la seguridad...