Madrid. No por esperado resulta menos apabullante el dato sobre el hundimiento del sector inmobiliario en Madrid. Como dato elocuente, las autorizaciones municipales para la construcción de viviendas pasaron del máximo anual de 2002 con cerca de 22.000 a tan solo 2.584 en 2010, según consta en la memoria de la Gerencia de Urbanismo correspondiente a este último año. El descenso es continuo desde esa fecha pero adquiere tintes vertiginosos entre 2007 y 2008 cuando se pasa de 10.559 a 6.449 licencias de construcción.
En el mismo documento se admite un sensible descenso en el número de rehabilitaciones por parte de la EMVS que ha sido paralelo al del presupuesto de esta partida. En suma, una radiografía sombría de un sector al que se fío la expansión económica por parte de las Administraciones y hoy ha sido uno de los principales responsables de la grave crisis económica.
En este escenario, el portavoz municipal de IU, Ángel Pérez, hizo especial hincapié en la necesidad de transformar esta tendencia en el capítulo de la rehabilitación ya que el mercado de nueva vivienda, tal y como delatan las estadísticas, está prácticamente sin actividad. “Defendimos en campaña, y la situación si ha cambiado es a peor en este sector, que la rehabilitación debía ser el pilar fundamental en la Legislatura tanto de la política de vivienda como en los mecanismos de creación de empleo”.
“Se trataría no sólo de rehabilitar viviendas que lo necesitan de manera urgente sino también de proceder a un plan de actuaciones, a través de la Inspección Técnica de Edificios, sobre unas cinco mil viviendas al año que no necesitan ser rehabilitadas en su totalidad pero sí en algunos de sus componentes, ya sea fachada, cañerías, y que, con la intervención previa de la inspección, no llegarían al nivel de deterioro necesario para tener que ser rehabilitadas en su totalidad”, señala Pérez.