Madrid. La Comunidad de Madrid ha entregado en Alcorcón las llaves de 359 viviendas protegidas del Plan Joven de alquiler con opción a compra promovidos por la iniciativa privada. Un acto presidido por la consejera de Medio Ambiente y Ordenación del Territorio, Ana Isabel Mariño, en el que destacó que el Gobierno regional genera más de 120.000 puestos de trabajo cada año en la Región vinculados a la actividad inmobiliaria gracias a sus políticas de vivienda protegida.
Las viviendas en alquiler con opción a compra se localizan en el barrio de Las Retamas de Alcorcón, y los jóvenes adjudicatarios (con unos ingresos que no superan en 5,5 veces el índice Iprem) disfrutarán de su primera vivienda por un alquiler mensual medio de 400 euros, plaza de garaje y trastero incluidos.
Después, a los siete años, podrán optar por adquirirlas por un precio final medio de 120.000 euros, una vez descontado la mitad de lo pagado en arrendamientos durante ese periodo. Estos precios suponen un ahorro medio de unos 110.000 euros respecto a una vivienda del mercado libre. Los pisos, de entre 1 y 2 dormitorios, cuentan con una superficie de entre 41 y 56 metros cuadrados de superficie, y nueve de ellos están adaptados a ciudadanos con movilidad reducida.
“La construcción de viviendas, además de satisfacer una demanda esencial de los ciudadanos, muchos de ellos de jóvenes, ha contribuido en los últimos años a una importante inyección de empleo en nuestra región, y en los próximos años queremos que sigan generándose puestos de trabajo gracias a una actividad residencial a la que nadie puede negar su papel como motor del crecimiento”, señaló Mariño, acompañada en el acto por el alcalde de Alcorcón, David Pérez.
Mariño destacó el liderazgo de la Comunidad de Madrid en la progresiva recuperación del sector inmobiliario en España, tal y como demuestran todos los indicadores de visados, hipotecas, compraventas, desempleo en el sector y descenso del stock. “Madrid es la región española donde se cierran más operaciones de compraventa de vivienda, donde más vivienda protegida se ha iniciado y terminado en lo que va de año, donde las hipotecas mantienen un ritmo más constante, o donde más ha descendido el paro en el sector de la construcción”, enumeró la consejera.
Pese a esta tendencia positiva, Mariño aseguró que “desde el Ejecutivo regional no nos conformamos, y además sin caer en la tentación simplista de achacar a la actividad inmobiliaria todos los males de nuestra economía cuando la edificación residencial, ahora más sostenible, tiene un efecto muy positivo para cimentar nuestro crecimiento y productividad”.