En una vivienda o local, cualquier mejora en su construcción e instalación tiene su repercusión en el precio, que sube tras la renovación. Desde pequeños a grandes mejoras, todas añaden un valor a los inmuebles a la hora de ser vendidos o alquilados.
Los profesionales confiesan que éste es un muy buen argumento para vender o alquilar el piso a los usuarios porque, además de encontrarse con una vivienda reconstruida y renovada, son conscientes que los cambios necesarios ya se han llevado a cabo por otras personas, y esto incluye el hecho de no invertir tiempo personal en informarse, comprar e instalar nada nuevo y, por supuesto, el bolsillo se ve beneficiado puesto que al menos la reforma no ha salido de su propia cartera.
Las mejoras que más valor tienen para los compradores son aquellas relacionadas con la termicidad y la acústica. Es decir, lo que realmente da valor a un hogar u oficina son aquellos factores principales que potencian la comodidad, bienestar y calidad de vida en la vivienda, más que temas como la decoración, por ejemplo, que se consideran menos relevantes y esenciales, pues se puede hacer de una forma más paulatina y con costes menores, según los gustos u opciones del habitante. Raquel García, responsable de administración de Tancaments.cat, reconoce que «son muchos los clientes que hacen reformas integrales de ventanas antes de poner a la venta o en alquiler su vivienda porque el valor y el precio suben». Y es que, todo aquello relacionado con una mejora energética es directamente proporcional a un ahorro energético también, que conlleva a la larga, una recuperación de la inversión económica hecha para las reformas ya que el precio de las facturas del agua y la luz disminuyen.
Hay tres tipos de viviendas: aquellas que están en mal estado, destrozadas prácticamente y que necesitan una reforma completa, las viviendas normales, aquellas en las que se puede entrar a vivir perfectamente y que necesitan una pequeña inversión en reformas, y por último, están aquellas que no se necesitan reformar para nada porque ya se encuentran en perfecto estado. En la mayoría de casos se llevan a cabo reformas. Y es que, las reformas bien hechas sirven para atraer y agradar a los posibles compradores y inquilinos, y los expertos recalcan su importancia ya que se venden mucho más rápido.