Ya están en marcha las primeras actuaciones en el edificio de la antigua sede de la ONCE, situado en la calle de Calàbria, entre Sepúlveda i Floridablanca. Lo primero será desmontar la marquesina de la fachada, retirar la maquinaria del interior y dejar el espacio diáfano.
Esta primera fase cuenta con un presupuesto de 370.000 euros y se prevé que finalice a principios de mayo. La segunda, consistirá en la adecuación de los 9.000 metros cuadrados destinados una parte a equipamientos municipales y la otra, a uso vecinal.
Para el concejal de L’Eixample, Gerard Ardanuy, "es una satisfacción ver cómo se ha desarrollado un proyecto de obra muy vinculado al uso social que se le dará, con estos espacios pactados con el entorno vecinal que se destinarán a uso social y educativo, una parte, y a servicios a los ciudadanos, otra".
El proyecto completo cuenta con un presupuesto de licitación de 11.987.000 euros y está previsto que las actuaciones estén terminadas a mediados de 2015. Además de los espacios comunes y del uso vecinal, también se ubicará en ese edificio el Centro de Formación de Adultos Pere Calders, el Centro de Normalización Lingüística, BSM y la Dirección de Atención al Ciudadano.
Para llevar a cabo las actuaciones, a partir del 11 de febrero se cerrará un carril al tráfico en la calle de Calàbria y se anulará la zona de aparcamiento. La acera quedará cerrada por el lado Besòs y se desviará el paso por el lado Llobregat. La parada de autobús del 41 se traslada provisionalmente a la parada del bus 31, en la avenida de Mistral con la calle de Tamarit.