Cuenca. La nueva sede de la Empresa Pública de Gestión Ambiental de Castilla-La Mancha “tiene algunas singularidades, por ejemplo, va a albergar el Centro de Operaciones de Lucha contra incendios forestales y una réplica del Centro de Coordinación regional por si existiera algún problema en el de Toledo”, ha explicado hoy en Cuenca el consejero de Agricultura y Medio Ambiente, José Luis Martínez Guijarro, que ha visitado las obras de la nueva sede de la empresa pública.
Martínez Guijarro ha adelantado en Cuenca cuáles serán los inquilinos de este edificio bioclimático, al que ha calificado como “uno de los edificios más personales de obra civil de la región”, que además de albergar los servicios centrales de GEACAM, contendrá también los de la Fundación General de Medio Ambiente, el Centro de Operaciones Provinciales y una réplica del Centro de Coordinación Regional (COR), ubicado en Toledo.
Con la réplica del COR en Cuenca “nos hemos adelantado a uno de los requisitos que entrará en vigor en los próximos años”, ya que en el caso de que existiese un problema puntual en el centro ubicado en Toledo “podremos coordinar desde Cuenca a todos los centros provinciales”.
La nueva sede de la Empresa Pública de Gestión Ambiental de Castilla-La Mancha y de la Fundación General de Medio Ambiente posee un total de 4.300 metros cuadrados útiles, cuyo presupuesto es de casi 6.400.000 euros sin sumar el equipamiento correspondiente; “es un edificio diseñado para tener un uso muy eficiente de la energía. La utilización de la luz natural es una sus características esenciales, y además los sistemas de suministro de energía también utilizarán energías renovables: por un lado, placas fotovoltaicas, y por otro, la utilización de biomasa”, ha argumentado el responsable de Agricultura y Medio Ambiente.
Edificio bioclimático
Dado el uso que tendrá el edificio se ha pretendido crear un lugar en el que los espacios naturales se fundan con el mismo, dando mucha importancia a los patios ajardinados y a las cubiertas ecológicas, gestos básicos mediante los cuales se pretende la integración del paisaje en el edificio. Así, se han obtenido tres piezas que pretenden dialogar con el entorno y adaptarse a las responsabilidades técnicas y paisajísticas que a un edificio relacionado de forma tan directa con el medio ambiente le corresponden.
Como soluciones bioclimáticas destacan los lucernarios que funcionan como chimeneas de ventilación y chimeneas solares, cubiertas ecológicas, aljibes para el riego de la vegetación, cerramientos sostenibles en cuánto al mínimo de pérdidas energéticas, voladizos parasoles, sombreamiento natural mediante vegetación, ventiladores de apoyo, etc.