La Comunidad de Madrid se ha posicionado como un referente en el desarrollo de Centros de Procesamiento de Datos (CPD), tras experimentar un notable aumento en su potencia instalada durante el año 2023. Según datos recientes, Madrid ha incrementado su capacidad en un 56%, alcanzando los 164 megavatios (MW) de potencia instalada, lo que representa más del 80% del total nacional. Este crecimiento no solo refuerza la infraestructura tecnológica de la región, sino que también fortalece su papel en el avance de tecnologías emergentes como la realidad aumentada, el metaverso, el 5G, el internet industrial y la Inteligencia Artificial.
El consejero de Digitalización de la Comunidad de Madrid, Miguel López-Valverde, ha subrayado la importancia de esta expansión durante su intervención en la Asamblea regional. Con 39 instalaciones ya operativas y la previsión de nuevos proyectos que consolidarán aún más la posición de Madrid frente a otros nodos digitales europeos como Frankfurt, Londres, París y Dublín, la región se perfila como líder en el sur de Europa. Según un informe de la consultora canadiense Colliers, Madrid dispone de una de las infraestructuras de conectividad más avanzadas y modernas a nivel mundial, con planes de expansión que podrían elevar la potencia total a 748 MW.
Estrategias y desafíos en el desarrollo digital
La estrategia de digitalización de Madrid se centra no solo en la ampliación de su infraestructura de CPD, sino también en la adopción de políticas que favorezcan la inversión y simplifiquen los trámites administrativos para las empresas del sector. López-Valverde ha destacado la ubicación estratégica de Madrid como un punto neurálgico de interconexión y las ventajas fiscales que ofrece la región, aspectos que han resultado claves para atraer inversiones significativas.
No obstante, el consejero ha lamentado la falta de apoyo por parte del Gobierno central, específicamente en relación con las propuestas de modificación al Plan de Desarrollo de la Red de Transporte de Energía Eléctrica 2021-2026, rechazadas por el Ejecutivo. Esta situación, según López-Valverde, podría obstaculizar el potencial de España, y especialmente de Madrid, para consolidarse como una potencia tecnológica relevante a nivel internacional.
El dinamismo del sector de los CPD en Madrid no solo es una cuestión tecnológica, sino también económica y laboral. Se estima que la inversión directa e indirecta derivada de este ámbito podría superar los 16.000 millones de euros, generando empleo de calidad, particularmente en el sector de la Formación Profesional. Sin embargo, el consejero advierte que la falta de acciones concretas por parte del gobierno central podría desviar la atención y los recursos de los inversores hacia otros países, lo que representaría una significativa pérdida de oportunidades para la región y para España en general.
Este panorama refleja no solo la capacidad de innovación y crecimiento de Madrid en el ámbito digital, sino también los desafíos políticos y económicos que enfrenta en su camino hacia la consolidación como un nodo digital de referencia en Europa y en el mundo.