La retirada definitiva del proyecto BCN World, el macroproyecto turístico y de ocio que estaba previsto promover en las inmediaciones del parque temático Port Aventura, entre los municipios tarraconenses de Salou y Vilaseca, ha sido una de las cesiones con las que Junts Pel Sí ha tenido que aceptar para que la CUP finalmente otorgue la investidura a Artur Mas como nuevo presidente de la Generalitat de Cataluña.
El proyecto venía ya muy tocado, con la retirada paulatina de inversores y la reducción de seis a tres los casinos a construir, pero ahora con la suspensión del Plan Director Urbanístico (PDU) -la norma que iba a regular su implantación-, la que iba a ser la alternativa catalana a Eurovegas también se queda por el camino.
El pasado mes de mayo, con la retirada de Veremonte, el grupo del promotor Enrique Bañuelos, el proyecto ya había quedado muy tocado. Algo que se venía venir desde meses antes.
Veremonte había presionado al Gobierno catalán para que le hiciera una ley a medida que rebajara los impuestos al juego y elaborara un plan director urbanístico que regulara la edificación en el sector. Tras no lograrlo, descartó ejercer la opción de compra por los terrenos que albergarían el complejo.
Sin esas leyes a medida, Bañuelos dejó de contar con las expectativas de obtener importantes ganancias con la venta de los terrenos que se comprometió a adquirir a La Caixa y, también, de la venta de sus participaciones en las dos licencias de los casinos.
A partir de ese momento, Bañuelos se quedó simplemente para resolver su salida de las sociedades que comparte con Hard Rock y Melco, y ver si podría recuperar parte de los recursos invertidos.
Desde ese momento, la Generalitat tomó el control de la situación. Y se puso manos a la obra para elaborar el PDU y prepara el concurso definitivo de las licencias de casino. Además, se puso a buscar otros inversores que se hicieran cargo de las inversiones necesarias para levantar el complejo. Pero, con la inestabilidad política y los procesos electorales, todo se había ralentizado y apuntaba a que terminaría como va a terminar. En nada.