El nuevo Gobierno de Castilla-La Mancha cumple con uno de sus compromisos electorales, como era el de impedir acometer en la región proyectos de fractura hidráulica, el conocido como ‘fracking’.
No llega a prohibirlo de manera taxativa, pero serán tantos los filtros que deberán pasar las empresas que soliciten poner en marcha sondeos para acometer proyectos mediante esta práctica, que será muy difícil que ninguna de las solicitudes acaba siendo finalmente aceptada. Y muchas de ellas, ni siquiera se lo plantearán por el coste que supone la tramitación, para, además, no tener prácticamente opciones de lograrlo.
Con el anteproyecto de ley presentado, que proseguirá ahora en fase de información pública, lo que busca el Ejecutivo castellano-manchego es prevenir y actuar de manera lo más prudente posible.
En la futura ley se especificará un Plan Estratégico que habrá que cumplir y los posibles proyectos deberán ser aprobados por el Consejo de Gobierno mediante Decreto. En la elaboración de dicho plan participará desde el principio la población afectada y, en ambos casos resultará, además, preceptivo el trámite de información pública.
Además, cada uno de los proyectos deberá pasar por una rigurosa evaluación ambiental, que analice con especial atención los riesgos derivados de la técnica sobre la salud humana y el medio ambiente, las necesidades de recursos hídricos, la gestión de los residuos generados y las emisiones de contaminantes atmosféricos y de gases de efecto invernadero. La restricción del plan establecerá la zonificación del territorio recogiendo para identificar las zonas más vulnerables.
El documento inicial de trabajo se ha elaborado en base a las recomendaciones de la Comisión Europea relativa a la prevención de la contaminación en acuíferos y suelos. También se han tenido en cuenta la normal legal similar existente en el País Vasco, la única que no ha sido contestada por el Tribunal Constitucional.
El anteproyecto ha sido analizado en el Consejo de Gobierno, con la presencia de representantes de la Plataforma contra el Fracking del Campo de Montiel y La Mancha y la Plataforma contra el Fracking de Guadalajara, quienes mostraban su satisfacción por las iniciativas que se están tomando contra los sondeos para llevar a cabo este tipo de prácticas de fractura hidráulica.
