El Ayuntamiento de Barcelona, a través de la sociedad municipal Barcelona Gestión Urbanística, SA ha iniciado el derribo de las últimas casas de los antiguos funcionarios de la prisión de Trinitat Vella, en el distrito de Sant Andreu.En concreto, ahora se derriban dos edificios que acogían cuatro pabellones, 19-20-21-22, que eran los últimos que quedaban en pie.
La Generalidad de Cataluña ha recuperado esta semana la posesión del pabellón número 22, que estaba ocupado ilegalmente. Inmediatamente después de la desocupación, se inutilizaron los espacios a la espera de poder iniciar el desmantelamiento.
Los derribos de los pabellones de los antiguos funcionarios de la prisión se iniciaron en abril del 2013 por los pabellones 3 y 4 ubicados en la calle Pare Pérez del Pulgar, 36-38. El primero de estos pabellones había sufrido un incendio y el segundo había sido ocupado ilegalmente por una familia que se marchó voluntariamente.
Posteriormente, durante el mes de noviembre se llevaron a cabo los derribos de los pabellones 5-6, 7-8, 15-16 y 17-18, se arregló el muro perimetral del recinto de la antigua prisión y se realizó la adecuación de los solares restantes.
En total, el Ayuntamiento de Barcelona ha destinado 250.000 euros a estas actuaciones. Una vez terminados estos últimos derribos, este espacio acogerá usos provisionales, acordados con las entidades vecinales, hasta que se ejecute el planeamiento urbanístico previsto en este ámbito.
Estos derribos son fruto del convenio firmado en abril del 2013 entre el Ayuntamiento de Barcelona y el Departamento de Justicia de la Generalitat de Catalunya, que incluye la ejecución de los derribos que quedaban pendientes de los pabellones de viviendas que conformaban el perímetro del antiguo Centro Penitenciario de Jóvenes de Barcelona.
