Según el informe Global Living, elaborado por Savills Aguirre Newman, la inversión global en el sector residencial ha alcanzado los 110 mil millones de dólares en el primer semestre de 2019, un aumento interanual del 9 %, en un momento en el que la inversión en el resto de activos inmobiliarios ha descendido. En este sentido, la inversión en el sector residencial global ha aumentado un 56 % en los últimos cinco años, convirtiéndose en la segunda clase de activos de mayor inversión inmobiliaria, después de oficinas.
Según el informe de Savills, los inversores están modificando su foco de inversión hacia activos residenciales operativos para aumentar la cuota de rentabilidad, siendo los segmentos de residencias de estudiantes, sénior y residencial en alquiler los objetivos principales. La inversión en este último tipo de activo es superior a residencias de estudiantes y sénior. En concreto, ha aumentado un 13 % en comparación con el primer semestre de 2018, hasta alcanzar una inversión de 97 mil millones de dólares durante los seis primeros meses de 2019. Con estos datos, tras un año récord en 2018, Savills prevé que en 2019 se supere el volumen invertido en residencial a nivel global por tercer año consecutivo.
En España, la tendencia va del mismo modo en ascenso. En 2018, la actividad en el mercado residencial fue muy elevada, con más de 3.000 millones de euros invertidos en este mercado tanto en activos individuales como en portfolios y proyectos built to rent, pero fue el segmento retail, que batió récord, el único que lo superó. En 2019, la previsión es que oficinas, con más de 2.300 millones de euros invertidos en lo que va de año, será de nuevo el mercado con mayor participación sin tener en cuenta operaciones corporativas. En este sentido, la consultora señala que la inversión residencial en la modalidad built to rent es la que está ganando mayor penetración en el mercado dada la escasa oferta existente de producto terminado y el elevado apetito de inversores institucionales por este mercado. Para 2019, se prevé que la actividad supere los 1.500 millones de euros convirtiéndose en el segundo mayor nivel nunca alcanzado.
Alejandro Campoy, director general de Savills Aguirre Newman, explica que «la búsqueda por parte de los inversores de fuentes de ingresos seguras seguirá apuntalando el interés por los activos residenciales conocidos como alternativos hasta ahora, pero cada vez más presentes en el mix de inversión. En nuestro mercado, al haber de nuevo producto en el mercado por la rotación, oficinas ha vuelto a ser el principal mercado tras dos años liderados por retail. Pero tras la entrada de los primeros inversores institucionales en residencial, el interés continúa en aumento. Después de más de cinco años de elevada actividad estamos ante un mercado cada vez más maduro para la inversión internacional», concluye Campoy.
Cross-border residencial
La inversión cross-border global en residencial fue de 51 mil millones de dólares en 2018, contabilizando el 21 % del capital transfronterizo registrado, cuando hace cinco años suponía 13 % del total, con 22 mil millones. La vivienda estudiantil atrae la mayor cantidad de operaciones de capital transfronterizo, con un 25 % del total. Sin embargo, la inversión en viviendas multifamiliares y para personas mayores es mucho más doméstica en comparación, con el 16 % y 15 % respectivamente de la inversión cross-border en la primera mitad de 2019.
En cuanto a nacionalidad, EEUU y Canadá han liderado el camino con el 44 % del volumen invertido en residencial fuera de su mercado de origen en los últimos seis años. Los jugadores más importantes son Brookfield Asset Management (Canadá), Blackstone (EE UU), CPP Investment Board (Canadá) y Cerberus (EE UU).
Los cinco principales inversores representaron el 26 % de la inversión cross-border en residencial multifamiliar, mientras en residencias de estudiantes y sénior, la concentración es mucho mayor pues los cinco principales actores en cada segmento acapararon el 59 % y el 37 % de la inversión internacional respectivamente.