La Xunta de Galicia y Abanca acaban de renovar el convenio de colaboración para ceder viviendas de alquiler social a más de ochenta familias. La conselleira de Medio Ambiente, Territorio y Vivienda, Ángeles Vázquez, y el conselleiro delegado de Abanca, Francisco Botas Ratera, renovaron el convenio de colaboración firmado en 2015, para destinar viviendas de alquiler social cedidas por la entidad hasta el año 2022.
Gracias a la renovación de este convenio (el primero se firmó en 2015) se prolonga por tres años más, hasta el 2022, la cesión de viviendas por parte de la entidad financiera para destinarlas a alquiler social por parte de la Xunta de Galicia permitiendo continuar residiendo en sus viviendas, en régimen de alquiler social, a familias afectadas por ejecuciones hipotecarias.
Además, el nuevo convenio establece la posibilidad de cesión de nuevas viviendas por parte de la entidad, que el IGVS destinará a atender casos de emergencia social.
Esta medida es acorde con los fines que establece el programa Realoxo de afectados por ejecuciones hipotecarias, con el que se pretende dar una respuesta a aquellas personas que perdiesen su vivienda y ofrecer un domicilio alternativo a aquellos que perdieran su única vivienda. Se facilita un inmueble propiedad del IGVS o inmuebles cedidos a la Xunta por las entidades financieras.
La conselleira de Medio Ambiente recordó que para aquellos casos que necesitan de un apoyo urgente, se cuenta con el Bono de Alquiler Social. Se trata de una ayuda con un importe máximo de 225 euros mensuales que se concede por un período de 12 meses prorrogables hasta un total de tres años.
Además, incluye una ayuda única adicional de 600 euros para hacer frente a pagos atrasados o a los gastos de formalización de un nuevo contrato.
Ángeles Vázquez aseguró que la Xunta trabaja para que los ciudadanos no pierdan su hogar, por eso dentro de la Agenda Social, se definieron y se activaron un total de 12 medidas encaminadas a dar cobertura a las personas en riesgo de perder su vivienda o que ya la perdieron por no poder hacer frente al pago de la cuota hipotecaria.
Son herramientas que pretenden garantizar una ayuda de la Xunta a todas las personas afectadas que lo soliciten y cumplan los requisitos.
Por su parte, el consejero delegado de Abanca reiteró que la entidad se suma nuevamente a esta iniciativa «porque es una herramienta positiva para ayudar a las personas que atraviesan situaciones de dificultad relacionadas con su vivienda». Francisco Botas aseguró que Abanca seguirá adoptando todas aquellas medidas, ya sean a título individual o en colaboración, que permitan aportar soluciones a este problema.