Canarias. La supresión de primas a la generación de renovables acordada por el Gobierno del Estado, supone un auténtico mazazo a las aspiraciones de Canarias, y a su obligación, en el objetivo de reducir su dependencia de los combustibles fósiles. Así lo manifestó el vicepresidente y consejero de Educación, Universidades y Sostenibilidad del Gobierno de Canarias, José Miguel Pérez, en su comparecencia parlamentaria para responder a una pregunta sobre los resultados de la conferencia sobre el cambio climático, la llamada Cumbre de Durban, celebrada a finales del año pasado en la ciudad de Sudáfrica.
En la larga batalla que supone concienciar a sociedades y gobiernos, en obligarles a adoptar medidas que permitan combatir el calentamiento global, territorios como Canarias no disponen, ajuicio de Pérez, de la capacidad de presión o de negociación capaz de forzar cambios en las políticas de los países más contaminantes.
“La fuerza de Canarias derivará, en todo caso, de su condición de laboratorio de sostenibilidad, de ejemplo vivo de cómo combinar el desarrollo humano con la preservación del planeta”, explicó.
Entre los acuerdos tomados por los 194 países participantes en la Cumbre destacaron tres: El lanzamiento de un protocolo que se aplicaría a todos los miembros. Un segundo período de compromiso para el actual Protocolo de Kyoto. Y, por último, la puesta en marcha del Fondo Verde para el Clima.
“Por tanto, el acuerdo que se pudo alcanzar establece una hoja de ruta en virtud de la cual deberá llegarse a un acuerdo de recorte de emisiones que deberá ser adoptado a más tardar en 2015, y la extensión del protocolo de Kyoto por un plazo adicional que culminará en 2020”, matizó el vicepresidente.
En cuanto al Fondo Verde para el Clima, Pérez dijo que se trataría de fijar un precio a las emisiones de dióxido de carbono en todo el mundo, con el objetivo de nutrir un fondo destinado a financiar proyectos de adaptación al cambio climático en los países del sur.
“Podría concluirse, por tanto, que los resultados de Durban se han limitado, en el mejor de los casos, a mantener los compromisos de Kioto, que ya sabemos no solo incumplidos, sino insuficientes para evitar los peores escenarios derivados de continuar emitiendo gases de efecto invernadero”, añadió.
El Consejo de Ministros de Medio Ambiente de la Unión Europea (9 marzo 2012) trató de determinar los elementos principales de la posición de la UE en relación con la negociación internacional en materia de cambio climático y marcar las líneas de trabajo para 2012 con vistas a la Conferencia de las Partes 18 que tendrá lugar en Doha (Qatar) a finales de este año.
Los principales mensajes de las conclusiones alcanzadas fueron la necesidad de empezar a trabajar bajo la Plataforma de Durban lo antes posible para negociar el nuevo instrumento global y aumentar el nivel de ambición. Y, la Unión Europea mantiene su compromiso con el segundo periodo del Protocolo de Kioto y dará los pasos necesarios para la adopción formal de sus enmiendas en Qatar.