Reino Unido. Iberdrola Renovables, a través de su filial ScottishPower Renewables, y la empresa danesa Dong han encargado a Siemens el suministro de los aerogeneradores del parque eólico marino (offshore) de West Of Duddon Sands, que ambas promueven al 50% en Reino Unido y cuya entrada en funcionamiento está prevista para el año 2014.
El contrato firmado con la compañía alemana asciende a cerca de 700 millones de euros y, en el caso de Iberdrola, se trata del mayor acuerdo de compra de aerogeneradores para un parque eólico de su historia y la primera incursión que hace en el negocio de la energía ‘offshore’.
Según los términos del citado contrato, Siemens se ocupará del diseño y transporte hasta el puerto de Belfast y la instalación y puesta en marcha en el mar de 108 aerogeneradores de 3,6 megavatios (MW) de potencia y 80 metros de altura. Siemens se compromete a dar mantenimiento a las turbinas durante cinco años en virtud de otro contrato valorado en unos 36,6 millones de euros.
West Of Duddon Sands contará con una potencia de 389 megavatios (MW), suficiente para atender el consumo de energía eléctrica de 300.000 hogares británicos, por lo que será una de las instalaciones offshore más grandes del mundo cuando se ponga en servicio. Se tratará de la primera vez que Iberdrola Renovables instala aerogeneradores de más de 3 MW de potencia en un parque eólico, lo que supone un gran salto tecnológico para la Empresa.
La puesta en marcha de esta infraestructura renovable va a requerir una inversión total de 1.600 millones de libras, que serán aportados a partes iguales por Renovables y Dong. La instalación estará ubicada a 14 kilómetros al suroeste de la costa de Barrow-in-Furness, en Inglaterra.
Las dos empresas ya han finalizado el diseño completo del proyecto, que incluye, además del citado encargo a Siemens, la planificación de todas las conexiones eléctricas del parque, formadas por el cableado submarino y la subestación transformadora necesarios para llevar la energía a la red terrestre nacional.
El montaje se realizará, en buena medida, en el puerto de Belfast y las operaciones se llevarán a cabo desde el puerto de Barrow. Para la construcción del citado parque se contará con dos buques, especialmente diseñados para este tipo de infraestructuras, dado que permiten realizar los trabajos en condiciones meteorológicas extremas.
La construcción de esta instalación ‘offshore’ se estima que generará unos 500 empleos, a los que habrá que sumar en un futuro otros tantos necesarios para las labores de operación y mantenimiento. Está previsto que los trabajos se inicien el próximo año, con las conexiones eléctricas, mientras que en 2013 se procederá a instalar los aerogeneradores.