No estaba claro que lo fueran a hacer por algunas divergencias entre los socios, pero al final los hoteleros de Barcelona han recurrido, ante la Sala de lo Contencioso-Administrativo del Tribunal Superior de Justicia de Catalunya (TSJC), el Plan Especial Urbanístico de Alojamientos Turísticos (PEUAT) impulsado por el Ayuntamiento presidido por Ada Colau.
Aprobado el pasado 27 de enero, el PEUAT limitará las reformas estructurales de los establecimientos, la verdadera preocupación de la asociación, pues muchos altos cargos cuentan con establecimientos envejecidos.
La asociación ha lamenta en un comunicado que «la restricción comportará una degradación progresiva de la mitad de los hoteles de Barcelona, que no podrán realizar las obras de mejora y adecuación necesarias».
«Hará retroceder la calidad de los hoteles, por lo que también bajará el nivel de los viajeros que nos visitan, un hecho que golpeará la calidad de vida de nuestros vecinos», añade el texto. «No nos sentimos partícipes del plan aprobado por el ayuntamiento, pues priva de libertad al empresario», zanja.
No obstante, la asociación obvia que el PEUAT sí acepta varios grados de obras y reformas. En el corazón de la ciudad, la zona más restringida, se admiten las obras sujetas a licencias menores, y también las que comporten un incremento del volumen edificable cuando sean imprescindibles para mejorar las condiciones de accesibilidad o la supresión de barreras arquitectónicas.
En ese sentido, el texto también habilita las obras que comporten una intervención global en la estructura del edificio siempre que se reduzca un 20% el volumen de plazas existentes. En definitiva, la única prohibición recae sobre las actuaciones que comporten la sustitución del edificio, pese a que se mantenga la fachada o algún elemento estructural.
El Plan Especial Urbanístico de Alojamientos Turísticos, el PEUAT, conforma el marco normativo en torno al cual se regulan los criterios urbanísticos y de gestión de los alojamientos turísticos de la ciudad de Barcelona.
Los alojamientos turísticos incluyen tanto establecimientos hoteleros, viviendas de uso turístico, apartamentos turísticos, albergues o residencias universitarias y son la pieza básica para ordenar el modelo turístico de la ciudad de Barcelona, así como para gestionar su impacto sobre los barrios de la ciudad.
Para la elaboración de este Plan, y partiendo de un análisis de la realidad existente en la ciudad con relación a los alojamientos turísticos, el Ayuntamiento de Barcelona promovió la realización de unas bases y criterios básicos que rijan el plan, de la mano de un trabajo compartido con los principales agentes implicados.