Bilboa. El titular del Juzgado de lo Mercantil número 1 de Bilbao, Marcos Bermúdez, ha dictado una sentencia en la que desestima íntegramente la demanda de una filial de la constructora ACS, para que se anularan los acuerdos de la junta de accionistas de Iberdrola que permitieron destituir a su representante en el consejo de administración de la eléctrica solo minutos después de ser nombrado.
El magistrado asegura que la decisión de la junta de accionistas de Iberdrola está justificada, ya que puede considerarse un “hecho notorio” la competencia entra ambos grupos. Ante esta sentencia, ACS interpondrá un recurso de apelación ante la Audiencia Provincial de Vizcaya contra la sentencia que ha desestimado íntegramente su demanda, como ha comunicado a la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV).
Según la sentencia, Iberdrola y ACS son competidores en los sectores de energías renovables e ingeniería industrial, estratégicos para Iberdrola, y mantienen intereses económicos contrapuestos en otras áreas de negocio, en especial en el desarrollo del coche eléctrico, en los servicios de ahorro energético y en sus relaciones comerciales como cliente/proveedor. Por ello, el cese del consejero nombrado por ACS en ejercicio de su derecho de representación proporcional en Iberdrola está amparado por la ley, que prevé la salida de los vocales con intereses contrapuestos a la sociedad.
La constructora se enfrentaba con una demanda interpuesta contra algunos acuerdos de la junta de accionistas de la eléctrica, que le impidieron entrar en el consejo de administración de la empresa presidida por Ignacio Sánchez Galán. Por su parte, Iberdrola también ha demandado a ACS en Madrid. La compañía ha reclamado al juez que obligue a ACS a desvelar los contratos de derivados financieros que tiene con la entidad Natixis.