Una reclamación cada dos días y medio; este es el ritmo en el que se producen las incidencias en las comunidades de vecinos españolas. Esto es lo que se desprende del estudio que la startup española todosvecinos.com ha elaborado en 2013 a fin de conocer las trastornos vecinales más comunes y las causas por las que se producen.
La red social todosvecinos.com, herramienta que permite a los miembros de una comunidad estar en contacto virtual directo, facilitar su comunicación y resolución de problemas, ha analizado las incidencias que, durante más de 500 días, se han producido en más de 4.500 comunidades de vecinos de todo el territorio nacional.
La mayor parte de las reclamaciones analizadas pone de relieve problemas habituales con las puertas, la electricidad, los ascensores o la fontanería. Desperfectos técnicos o averías demasiado frecuentes cuyo origen está estrechamente relacionado con su proceso de construcción.
Averías en puertas y electricidad copan las reclamaciones de los vecinos
Entre las más de 75.312 incidencias analizadas, un 23,9% de ellas tienen que ver con las puertas de garajes, portales o de acceso a las propias viviendas. Estas son, por tanto, las anomalías que con mayor frecuencia se producen en los edificios y que los vecinos señalan como el problema más habitual y preocupante, teniendo en cuenta que se trata de un elemento clave para la seguridad de las viviendas.
Por su parte, las incidencias relativas a problemas con la electricidad (16,4%) y con los ascensores (11,2%) son la segunda y tercera reclamación que en las comunidades de vecinos españolas se repiten de forma continuada.
La gestión de las comunidades preocupa cada vez más a los vecinos
La propia gestión de las comunidades es también un problema habitual, copando el 8,3% de las reclamaciones de los vecinos. Se trata de la quinta incidencia que los vecinos señalan con mayor frecuencia cuando se les pregunta por las incidencias más frecuentes y primera en la lista que no hace referencia a un problema técnico del edificio.
Este proceso de gestión se ve agravado por la situación económica actual donde pisos vacíos, expropiados, malas praxis o impagos de las cuotas y derramas encabezan la lista de esta categoría. Asimismo, la morosidad de las entidades bancarias y de promotores en pisos y otros locales desocupados, que no pagan las cuotas correspondientes, es un problema cada vez más frecuente. Este carga supone al resto de vecinos un esfuerzo extra para tener al día el estado de sus comunidades en relación a las averías que se producen.
Estudio realizado entre diciembre de 2011 y abril de 2013 entre 4.596 comunidades de vecinos de toda España y para el que se han analizado 75.312 incidencias.