Madrid. En la presentación previa a la Junta General de Accionistas de Realia, su presidente, Ignacio Bayón, adelantó las líneas maestras de actuación que van a guiar a la inmobiliaria, controlada por FCC y Caja Madrid, durante el presente ejercicio, entre ellas la de que disponen de 180 millones de euros para aumentar su cartera patrimonial.
Un aumento de la actividad patrimonial, en detrimento de la residencial, que, además de acometer la referida inversión, pasaría por futuros ingresos anuales de 21 millones de euros procedentes de la entrada en funcionamiento, entre 2011 y 2013, de cuatro edificios de oficinas (tres en París y uno en Madrid) y el centro comercial As Cancelas, en Santiago de Compostela, que suman un total de 61.564 metros cuadrados de superficie bruta alquilable (SBA).
Por lo que a vencimiento de contratos de alquiler se refiere, 2011 se presenta como un buen ejercicio, el mejor en este sentido de los últimos ejercicios. En cuanto a nivel actual de ocupación, tanto de sus oficinas como de los centros comerciales, se supera el 94%.
En cuanto al negocio residencial y, a pesar de las fuertes restricciones en cuanto a financiación se refiere, Realia pretende iniciar nuevas promociones para generar caja y poner en valor los suelos existentes.
La deuda neta financiera, tras descontar el remanente de tesorería, es de 2.132 millones de euros. Sin esos 267 millones, la deuda bruta se eleva a 2.399 millones, la mitad a devolver a partir de 2017. Este año vencen amortizaciones por el 5,9% de esa cantidad, algo más de 141 millones, y el próximo ejercicio la cosa se complica, al tener que pagar más de 803 millones, el 33,5%, por lo que se tendrá que volver a renegociar con las entidades financieras.