Madrid. Martinsa-Fadesa, la empresa presidida por Fernando Martín que está pendiente de un recurso de apelación para saber si es firme su salida del concurso de acreedores, han tenido que modificar el resultado de las cuentas presentadas al cierre del pasado ejercicio, según ha informado a la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV).
Cambios significativos en los estados financieros individuales, sobre todo por esos 26,3 millones que han tenido que ser provisionados para atender los riesgos de unas actas fiscales firmadas en disconformidad, en impuesto de sociedades y otros gastos de explotación por 20,1 y 6,2 millones de euros, respectivamente. De esta manera, las pérdidas se elevan a más de 853 millones de euros.
Otras modificaciones significativas en los saldos correspondientes al balance individual se relacionan con la clasificación, como activos no corrientes, la totalidad de las inversiones en empresas del grupo y asociadas, corrigiéndose la provisión por deterioro de éstas en 7 millones de euros. Asimismo, se corrigen valoraciones de existencias, adaptando la deuda comercial asociada.
También se reduce el patrimonio neto por el aumento de las pérdidas del ejercicio en 37 millones de euros para dotar, con 7,1 millones, el deterioro de inversiones en empresas del grupo y asociadas; otros 1,1 millones para dotación por deterioro de inversiones; 1,9 millones por el menor volumen de ingresos financieros con empresas del grupo, y 400.000 euros por el efecto neto de dotaciones por deterioro y pérdidas comerciales.
Además, se dota provisión por pérdidas futuras en operaciones comerciales iniciadas y concluidas durante el ejercicio 2010, aunque formalmente documentadas durante el ejercicio 2011, se clasifica como pasivo corriente la totalidad de la deuda concursal derivada de la lista definitiva de acreedores, y se reclasifica las dotaciones por deterioro de existencias del epígrafe de aprovisionamiento a otros gastos de explotación.
En este sentido, se registran en otros gastos de explotación las diferencias surgidas al registrar la deuda concursal por 31,1 millones de euros, registrada anteriormente en deterioro de instrumentos financieros.