Madrid. Tres meses después de cerrado el anterior acuerdo de refinanciación, Rayet, el grupo inmobiliario presidido por Félix Abánades, se ha visto obligado a buscar un nuevo acuerdo ya que el calendario de pagos al que se había comprometido el pasado mes de septiembre hubiera sido imposible de cumplir por la situación del mercado inmobiliario.
En lugar de la carencia en la amortización de principal de la deuda hasta el 31 de diciembre de 2012 y retrasar el pago de intereses hasta finales de 2011, el nuevo acuerdo pactado con las catorce entidades financieras acreedoras establece que esa carencia se extiende hasta el año 2016, excepción hecha de un crédito de 25 millones, que deberá ser amortizado en 2014. Además, la nueva refinanciación de 430 millones de euros supone que Rayet venda activos inmobiliarios por 200 millones de euros, el 40% de la cartera.
Además de la situación general del mercado inmobiliario, esta nueva reestructuración de la deuda ha venido motivada por la situación preconcursal en la que se halla Rayet Construcción, la filial que ha visto caer su facturación en un 40% acumulando numerosos impagos. Acreedores no financieros con los que se mantiene una deuda de otros 200 millones a los que se ha planteado el pago a cinco años o una quita del 30%.
La deuda financiera de la filial asciende a 30 millones de euros. Otros 53 millones corresponden a deudas con proveedores. En total, 1.300 empresas, a las que Rayet Construcción ha planteado una quita del 33%, a cambio de un pago al contado del 35% en el momento del acuerdo y el resto, en los próximos 24 meses. “En estos momentos, tenemos acuerdo con el 88% de los proveedores”, asegura Abánades. La refinanciación incluye una línea de crédito de 19 millones para pagar a estos proveedores.