Madrid. Las jornadas organizadas por la patronal hotelera Cehat no están pasando desapercibidas. Si en la sesión inaugural, su presidente, Juan Molas, ponía encima de la mesa la necesidad de impulsar las fusiones en el sector para evitar la “lamentable” oferta low cost, ayer fue Antonio Catalán, presidente de la cadena AC, el que cogió el testigo de manera inmediata para sorprender a todos los asistentes con el anuncio de la inminente compra, por parte de la cadena estadounidense Marriott, del 50% del grupo que preside.
Se ultiman los últimos flecos para formar la nueva ‘joint venture’ entre ambos grupos, tras la que la mayoría de los 93 establecimientos de AC pasarán a denominarse ‘AC by Marriott’, mientras que los de lujo quedarán integrados en ‘The Autograph Collection’, marca lanzada hace un años por la cadena estadounidense lanzó hace un año. Los nuevos ‘AC by Marriott’, hoteles de cuatro estrellas, pasarán a comercializarse a través de las plataformas de Marriott.
Catalán quiso resaltar el tradicional carácter familiar de Marriott International, lo que no le impide obtener 700 millones de euros anuales, y contar con una cartera de 3.800 hoteles por todo el mundo, curiosamente ninguno en propiedad. En este sentido, abogó por un sector hotelero gestionado con estructura familiar y comercializado a nivel internacional, y advirtió de que no hay futuro para hoteles individuales.
Respecto a la actual situación del mercado, el presidente de la cadena AC se mostró preocupado por la bajada de los precios, calificada de ‘dumping’ por la distorsión que produce en el mercado, para, a renglón seguido, sentenciar que los precios tienen que subir porque “los hoteleros no pueden seguir perdiendo dinero”.
También se refirió al hecho de que, sobre todo en algunas ciudades, ya no hacen falta más hoteles tras mostrar cómo está bajando la ocupación, especialmente en aquellas a las que llega el tren de alta velocidad, que está cambiando las costumbres de los visitantes.