Madrid. Vemusa es una de las inmobiliarias, junto a Pryconsa o Promociones, Renta y Mantenimiento, que puso a buen recaudo la titularidad de algunos inmuebles ante la que pudiera avecinarse. Un año antes de que la matriz promotora entrara en concurso de acreedores, la familia Ventero Muñoz registró Alquimaison Socimi, transfiriendo a la misma una serie de activos.
Mientras Alquimaison decide dar el paso a su cotización en bolsa, la matriz ha conseguido que los acreedores aprueben el convenio propuesto, como ha quedado refrendado por sentencia aprobatorio del juzgado de lo Mercantil número 10 de Madrid.
Vemusa fue declarada en concurso de acreedores en abril de 2011 por no poder hacer frente al pago de las deudas que, entre otras operaciones, le llevó entre 2007 y 2008, cuando ya la burbuja había estallado, a comprar un edificio en plena Gran Vía de Madrid o a hacerse con el 1% de las acciones del Banco Popular. No obstante, fue la intervención de Caja Castilla-La Mancha, a la que adeuda más de 100 millones, el origen de esta entrada en concurso por las operaciones conjuntas en las que ambas participaban.
Se trata de otra de esas empresas familiares, con más de 65 años de existencia, que hace cinco años efectuó el relevo generacional de padres a hijos. El abulense Enrique Ventero Terleira cedió un 20% de la compañía a cada uno de sus cuatro hijos. Decisión tomada por la edad del patriarca y tras pasar por la cárcel –salió bajo fianza de 300.000 euros– por su implicación en el ‘caso Malaya’ por los negocios acometidos junto a José Antonio Roca, el todopoderoso ex asesor de Urbanismo del Ayuntamiento de Marbella.
Tan altas eran las deudas que acarreaba el grupo y tanta la falta de liquidez que hace un par de meses Enrique Ventero puso a la venta, en el portal de Internet de Segunda Mano, todas las 14.042 acciones que posee en el Atlético de Madrid, a las que otorgaba un valor de algo más de 700.000 euros.
Ventero se convirtió en accionista del Atlético el 27 de junio de 2003 al canjear la deuda que con él tenía el club. Cambió los 700.471,20 euros de deuda por 14.042 acciones, a un valor de 49,88 euros cada una. Pero un año después el Atlético realizó una reducción de capital y el valor de las acciones decayó a 8,5 euros, valor nominal en el que fueron sacadas a la venta y suscritas por socios y abonados en 2004.
Al margen de esta urgencia de última hora, y centrándonos en el negocio inmobiliario, la compañía contaba hasta hace tres años con unos activos valorados en 1.200 millones de euros. La mayoría en suelo, con cerca de 4 millones de metros cuadrados urbanizables. Terrenos que, con la llegada de la crisis, no han podido ser traspasados ni tampoco desarrollados, y que, poco a poco, han ido quedando en manos de las entidades financieras a cambio de las deudas que no se pudieron amortizar.
Entre esas deudas, las generadas por operaciones acometidas entre 2007 y 2008.
13 febrero 2007: Compra, por 45 millones de euros, del Edificio Marqués de Cubas y Teatro Fontalba, en el número 30 de la Gran Vía Madrileña. La Caixa se tuvo que quedar con el inmueble tras la ejecución hipotecaria.
7 marzo 2007: Adquisición del 0,41% por ciento de las acciones de Banco Popular, en los que ha invertido 73 millones de euros.
26 marzo 2007: Compra a Inmobiliaria Espacio un edificio de oficinas de Madrid por 24 millones de euros.
26 octubre 2007: Para proseguir su expansión, ficha a tres nuevos consejeros independientes. El ex concejal de Urbanismo del Ayuntamiento de Madrid Ignacio del Río, el ex director general de Tributos Miguel Angel Sánchez y el abogado del Estado en excedencia Fernando Castromil.
13 diciembre 2007: Anuncio inversión de 60 millones de euros entre 2008 y 2009 para construir más de 300 viviendas en Varsovia, con un desembolso de 20 millones para la adquisición de 53.000 metros cuadrados edificables.
31 enero 2008: Invierte 50 millones de euros en la promoción de un hotel en Los Alcázares (Murcia).
31 marzo 2008: Amplía su participación en el Popular hasta el 1%, valorándose en más de 140 millones de euros.