Madrid. El Comité de la Federación Internacional del Hormigón, entre cuyos objetivos se encuentra el estudio de los puentes para ferrocarril de alta velocidad, ha visitado los viaductos de la Línea de Alta Velocidad (LAV) Madrid-Valladolid, en el tramo Soto del Real-Miraflores de la Sierra, para conocer de primera mano la técnica empleada en su construcción, así como el comportamiento de las infraestructuras al paso de las circulaciones.
En concreto, el grupo de expertos visitó los viaductos madrileños de Arroyo del Valle, que en el momento de su puesta en servicio, en diciembre de 2008, fue el más largo de Europa en tablero continuo (con 1.755 metros de longitud), y el de Majalahita, situados ambos en el trazado de la LAV en el tramo comprendido entre Madrid y Segovia, y que constituyen un ejemplo representativo de la técnica española en el diseño y construcción de puentes para ferrocarril de alta velocidad.
La visita del citado Comité se efectuó coincidiendo con la reunión mantenida en Madrid, con motivo de la redacción de una guía de proyecto de este tipo de viaductos por los que circulan trenes de alta velocidad, en la que se pretende destacar aquellos aspectos que los diferencian de los puentes de carretera o los del ferrocarril convencional.
El grupo de especialistas, entre los que figuraban representantes de los principales países en materia de alta velocidad ferroviaria, como son Alemania, Francia, Reino Unido, China y Japón, han tenido la oportunidad de observar el comportamiento de estas infraestructuras al paso de las circulaciones desde el interior del cajón que constituye el tablero de los viaductos, así como comprobar el buen funcionamiento de los sistemas de control y medición.
En este sentido, han podido observar el equipamiento que se instaló en el viaducto de Arroyo del Valle para su monitorización, con objeto de poder estudiar y controlar en tiempo real la evolución de un conjunto de variables físicas significativas durante los dos primeros años de su explotación.
De esta manera, los integrantes del Comité han comprobado personal y visualmente que el comportamiento real de las estructuras se corresponde con las hipótesis de los cálculos de los proyectos, mostrando su satisfacción por la experiencia de Adif en materia de construcción de estas infraestructuras de carácter singular, así como del resto de proyectos de este tipo que se han desarrollado en las líneas de alta velocidad españolas en servicio o ejecución.