Ginebra. Durante una conferencia pronunciada en la sede de la Organización de las Naciones Unidas (ONU), en Ginebra, el director general del Fondo Monetario Internacional (FMI), el francés Dominique Strauss-Kahn, ha pedido a las autoridades europeas aupar a la moneda única con políticas económicas únicas para, a renglón seguido, poner en duda ese modelo porque “evidentemente las políticas no pueden ser las mismas en Extremadura que en Baviera”, dijo.
Sobre la actual crisis económica, Strauss-Kahn, que acudió a la ciudad para participar en unas jornadas bajo el lema ‘El impacto de la crisis financiera en el gobierno económico mundial’, señaló, sin dar nombres, que “el problema real es la situación por la que atraviesan algunos estados europeos”, que sigue siendo muy preocupante y con un futuro muy incierto.
Puso en entredicho el papel que está jugando el G20, institución a la que augura un futuro irrelevante porque, a su juicio, los líderes, tras percibir una leve mejora económica, han preferido centrarse única y exclusivamente en sus problemas nacionales, además de excluir a los 167 países del resto del mundo que representan a un tercio de la población mundial.
El presidente del FMI y ex ministro socialista francés de Finanzas también quiso recordar que no fue capaz de predecir el momento en que sobrevino la crisis, aunque sí el primero, según él, en alertar del alcance de su gravedad. A su juicio, el modelo global de crecimiento se ha tornado en desequilibrado e insostenible porque confiaba en la solvencia de los países.
Por eso, “al empeorar los problemas económicos, aumenta la decepción con el equilibrio social, se mina la democracia y se debilitan las instituciones”, subrayó el director del FMI para quien el gran problema que queda por resolver es la regulación de las entidades financieras una vez aumentadas sus necesidades de capital.